Durante casi toda su carrera, los gemelos Markieff y Marcus Morris han jugado en el mismo equipo. Esta curiosa situación se extendió a la NBA, donde han estado sin separarse en los Suns.
La situación podría cambiar el próximo verano ya que los contratos de rookie de ambos jugadores finalizan y deberán buscar una nueva oportunidad, ya sea en Phoenix o en otra organización.
A pesar de que parece complicado, los hermanos quieren seguir juntos y están convencidos de poder lograrlo.
«Donde quiera que estemos juntos, ése es mi hogar», señaló Markieff para Philadelphia Inquirer. «Salimos y nos divertimos. El baloncesto no es lo mismo cuando estamos separados».
«Es una situación única», advertía Marcus. «Estamos tratando de hacer todo lo posible para que los equipos no sólo nos vean como dos jugadores, sino como un tándem. Con suerte, nos retiraremos juntos».