Decir Miami es decir lucha. Puede que los Heat no hagan el juego más vistoso de la NBA, pero si se trata de dejar la última gota de sudor sobre el parqué, con ellos no es negociable. Anoche, aún sin Jimmy Butler, se repusieron de un mal inicio para llevarse la victoria ante un buen equipo, como es Atlanta, por 98-106.
Hablamos de un flojo inicio de encuentro de los de Florida porque durante el primer y el segundo cuarto fueron a remolque con una desventaja que rondaba siempre los 10 puntos. No desfallecieron. Tras el paso por vestuarios apretaron los dientes y dieron un enorme salto en defensa; tanto es así que si en el primer tiempo encajaron 60 puntos, en el segundo solo permitieron 38. Sí, fueron asfixiando a su rival hasta colocarse 13 puntos arriba con menos de ocho minutos por jugar. A partir de ahí supieron manejar la renta para sellar el triunfo.
«Ha sido un triunfo valiente. Mantuvimos un equipo como ese con dos jugadores superestrellas como Trae Young y Dejounte Murray por debajo de los 100 puntos. Se nota mucho de qué está hecho este equipo. Tyler dando un paso al frente y Bam teniendo otra noche efectiva en ataque junto a Caleb Martin. Ya lo ha estado haciendo antes por nosotros. Sigue mejorando cada vez más», expresa Kyle Lowry, autor de 9 puntos y 9 asistencias.
No le falta razón al veterano base en su análisis. Adebayo se ha echado el equipo a sus espaldas y contra los Hawks se fue hasta los 32 puntos. Martin por su parte fue el mejor escudero del pívot con 20 tantos, mientras que Tyler Herro hizo un poco de todo para firmar un triple-doble de 11 puntos, 11 rebotes y 10 asistencias. Adebayo quiso destacar su entendimiento con el joven guard.
«Siento que hemos construido una gran conexión. Simplemente es algo que hemos ido formando durante cuatro años. Hombre, se siente como si hubiese sido más tiempo. No solo está mejorando en la cancha, sino que está mejorando fuera de la misma. Estamos construyendo una hermandad», sentencia.
Los Hawks, incómodos
Así explica Trae Young lo ocurrido en el partido. El base, quien acabaría con un doble-doble de 22 puntos y 14 asistencias, pero con un doloroso uno de ocho en triples, cree que Miami logró llevarles al lugar que querían. «Simplemente nos hicieron lanzar triples. No hemos estado tirando bien en lo que va de año desde la línea de 3 puntos, por lo que hay que darles crédito y ajustar el plan de juego», comenta sobre el 10 de 36 con el que concluyó el partido la organización de Georgia.
El mejor entre los chicos de Nate McMillan fue John Collins, quien terminó con 23 puntos y 14 rebotes. Dejounte Murray se quedó en 13 tantos con un 5 de 16 en el lanzamiento.
(Fotografía de Kevin C. Cox/Getty Images)