Después de algunos meses de poco juego en Oklahoma, la carrera de Vasiljie Micic podría haber dado un giro en su llegada a Charlotte. Desde que fuese traspasado a los Hornets el base serbio ha pasado de 12 a 23 minutos por noche. Lo que le ha empujado en lo estadístico y, sobre todo, en lo mental. Durante sus últimos días en los Thunder, surgieron ciertos rumores que le colocaban de vuelta en Europa. Sobre todo después de unas declaraciones del técnico de Panathinaikos, Ergin Ataman, su principal valedor en el Viejo Continente. ¿Su futuro? ni siquiera él lo tiene claro. «No lo sé, tengo un año más de contrato. Veremos», le cuenta a Mundo Deportivo.
El contrato de Micic (dos años por 15,4 millones de dólares) finaliza en el verano de 2025 y tiene una opción por parte del club para renovarlo un año más. Quizás una mala situación deportiva y personal podría forzar su regreso a Europa, pero ahora mismo parece que su idea es permanecer al otro lado del charco. «Quiero darme la oportunidad de trabajar duro y mejorar. Espero pasar la mayoría del verano trabajando en mi juego, en esas cosas específicas que tengo que mejorar para ser mejor en la NBA».
No obstante, al jugador balcánico sí se le atisba la idea de volver a Europa pensando en el medio plazo. «Claro que me gustaría jugar en el Barcelona. Estuve a punto de ir una vez. Pero mi corazón le pertenece al Efes, que es donde pasé cinco años. Si vuelvo, lo daré todo», apunta. Sobre su nuevo rol, en realidad Micic no cree que nada haya cambiado. «Simplemente juego más. Estoy intentando mostrar mi forma de ver el baloncesto y en solo diez partidos no te da tiempo a mostrar esto», dice sobre su aún corta estancia en Charlotte.
(Fotografía de portada de Tim Nwachukwu/Getty Images)