Los Utah Jazz han emergido como la gran sorpresa de este arranque de temporada. Tras tres semanas de competición, la franquicia de Salt Lake City ocupa la primera posición de la Conferencia Oeste con un balance de 9-3, además de ser el único equipo, junto a Cleveland Cavaliers y Phoenix Suns, en situarse entre las ocho primeras posiciones en ataque y en defensa.
Después de desprenderse en un mismo verano de Donovan Mitchell, Rudy Gobert, Bojan Bogdanovic y Royce O’Neale, además de contratar a Will Hardy como entrenador jefe, muchos daban por hecho que el destino inevitable de los Jazz sería ocupar las últimas posiciones de la liga de cara a elegir lo más alto posible en el draft de 2023. De momento, los resultados obtenidos y el juego exhibido reman en dirección contraria.
En todo caso, en el seno del vestuario de Utah han querido dejar claro que el ‘tanking’ nunca ha sido una opción. Lauri Markkanen, Collin Sexton y Nickeil Alexander-Walker han compartido en diversas declaraciones que utilizan estas previsiones como combustible en su juego. Ahora, Mike Conley ha profundizado más en este contexto en una entrevista para el medio The Athletic.
«Simplemente miramos a nuestro alrededor y dijimos que no somos nada de lo que la gente dice que somos», afirmó el veterano base. «Tenemos demasiados buenos jugadores para ‘tankear’. Lo supimos desde el primer día. Esto no es una reconstrucción. Nos dijimos a nosotros mismos que no somos tan malos y los muchachos se focalizaron en eso. Tenemos un sistema de creencias colectivo y sabíamos que teníamos la oportunidad de tener un buen comienzo.»
Conley reconoció en dicha entrevista que se vio fuera de los Jazz en diversos tramos del verano y que Los Angeles Clippers emergieron como un destino potencial antes de firmar a John Wall. Aunque su futuro en la franquicia sigue estando en entredicho, el guard señala ahora que su objetivo sigue siendo el mismo: luchar por el campeonato.
«Esto fue difícil al principio porque tengo 35 años y estoy muy acostumbrado a tener aspiraciones de campeonato. Vine a los Jazz para jugar por el título. Así que me preguntaba qué terminaría pasando. Pero una vez que tuvimos a un nuevo entrenador aquí y comenzó a diseñar las cosas, supe que quería seguir aquí. Estamos construyendo y desarrollando.»
De forma más concreta, Conley reconoció estar disfrutando con el juego de los Jazz y con su papel como mentor de los jóvenes. «Quería dejar mi ego a un lado y concentrarme en los muchachos. He amado cada segundo en este equipo. Estamos jugando una marca de baloncesto que no habíamos mostrado en mucho tiempo […] Estos jóvenes me mantienen en el aquí y el ahora. Todos constantemente hacen preguntas y quieren ver sesiones de vídeo. Ahora me siento como un entrenador. Me encanta jugar a este juego y lo disfruto.»
Conley ha comenzado la temporada a un gran nivel dentro del esquema colectivo aplicado por Hardy. Además de sus 12,6 puntos por partido, está promediando sus topes de carrera en asistencias (7,5) y porcentaje de acierto en triples (42,6%).
(Fotografía de portada de Stephen Maturen/Getty Images)