Timberwolves y Blazers se veían en Portland con un acumulado de nueve derrotas consecutivas. Ambos llegaban mal y ambos querían acabar con tal dinámica. Fueron los de Chris Finch quienes lo lograron.
Pese a recuperar a Damian Lillard, los de Oregon no pudieron dar una alegría a sus aficionados y sumaron su quinta derrota seguida. Fue dolorosa. Durante muchos momentos parecía que el triunfo sería para los Wolves, que en el tercer cuarto llegaron a ganar por hasta 12 puntos; sin embargo, Portland se repuso y mediado el último periodo dominaba por siete (100-93). Justo ahí se apagaron las luces de los chicos de Chauncey Billups, que encajaron un 11-26 en contra para cerrar la noche cayendo 111-116.
«Siento que estuvimos toda la noche un poco ansiosos. Tenía la esperanza de que se calmaran a medida que avanzaba el partido, pero no lo hicimos, realmente no nos calmamos», comenta el head coach de los Blazers sobre el exceso de nerviosismo de sus chicos.
Más allá de las sensaciones del técnico, lo cierto es que por momentos faltó acierto. Lillard se fue hasta los 24 puntos, 11 rebotes y 6 asistencias, pero se quedó en un 5 de 17 en tiros de campo (3 de 14 en triples). Mejor estuvo Anfernee Simmons, quien desde el banquillo fue el máximo anotador de los suyos con 26 puntos, incluyendo un 6 de 12 desde la larga distancia.
Tensión a ambos lados
Billups hablaba de ansiedad en su equipo, pero en Minnesota no se quedaban atrás. Anthony Edwards, autor de 24 puntos, explica lo importante que ha sido para el equipo lograr un triunfo que tranquiliza a toda la plantilla. «Todos estaban tan tensos… así que esta victoria hizo que todos respiraran profundamente y se calmaran. Ahora estamos bien. Volvimos a ser nosotros mismos».
A romper la mala racha de cinco derrotas consecutivas también ayudó el retorno de D’Angelo Russell. El base, quien era duda por molestias en el tobillo derecho, terminó jugando y logró 18 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias. Karl-Anthony Towns, quien firmó 23 puntos y 10 rebotes, destacó que fueran capaces de resolver el partido en los últimos minutos.
«D’Angelos estuvo fantástico. Conectó algunos tiros importantes cuando lo necesitábamos. Ellos ajustaron un poco su defensa en el último cuarto y lo resolvimos con el hombre adecuado. Fue excelente convertir los tiros cuando los necesitábamos».
(Fotografía de Rob Carr/Getty Images)