Los Minnesota Timberwolves siguen sin levantar cabeza y ante los Charlotte Hornets sumaron su 9ª derrota consecutiva que les deja con el peor récord de la NBA (7-29). Los de Minneapolis apenas han sumado 2 triunfos en las últimas 15 jornadas, y su última victoria llegó ante los Toronto Raptors el pasado 15 de febrero (116-112). La situación pinta muy gris y el cambio de entrenador jefe no está surtiendo el efecto esperado (0-5).
En la pasada noche se vieron superados por los Hornets por un amplio 135-102 comandados por un gran Terry Rozier III con 31 puntos y 6/12 en triples. Junto a él, Gordon Hayward agregó 23 tantos y 9 asistencias, y el joven LaMelo Ball sigue haciendo méritos para alzarse con el ROY: 19 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias y 2 robos con un 4/5 en triples.
«Creo que esta victoria simplemente valida la primera mitad de nuestra temporada», admitió James Borrego a ESPN. «Valida lo que estamos haciendo, cómo estamos jugando. Y esta noche ha sido un arduo trabajo y la unión de este grupo», agregó.
Rozier explotó en el tercer periodo con tres triples consecutivos en un lapso de 01:29 minutos que permitió obtener una plácida ventaja de 98-76 para encarar los últimos 12 minutos.
«La actuación de esta noche fue completamente inaceptable», destacó el técnico Chris Finch.
Cuatro titulares de los Timberwolves sumaron dobles dígitos de anotación: Ricky Rubio destacó 20 puntos y 9 asistencias; Anthony Edwards (19); Karl Anthony-Towns (16 tantos y 15 rebotes); y Jake Layman (14).
Actualmente los T-Wolves son la peor tercer defensa de la liga con 117 puntos encajados por encuentro, tan solo por detrás de Sacramento Kings (120) y Washington Wizards (119,2).
«Tenemos que analizarlo todo detenidamente y resolver el problema. Esta no es la forma en la que deberíamos jugar», admitió Towns.
(Fotografía de portada: Hannah Foslien/Getty Images)