Tras la derrota en casa ante Indiana Pacers los Pistons suman ya 20 consecutivas. Tras todo un mes de noviembre de partidos perdidos, la organización de Detroit se aproxima a la mitad de diciembre en la misma dinámica; es decir, perdiendo noche sí y noche también. Es obvio el peso psicológico que debe suponer saltar a la cancha en tales circunstancias. Monty Williams lo sabe y manda un mensaje de confianza a sus chicos.
«Por mucho que nos duela esta derrota, y duele como no serías capaz de creer, veo mucho crecimiento. Me siento alentado por algunas de las cosas que vimos esta noche. Sólo tenemos que aprovechar las oportunidades. Todavía estamos aprendiendo que todo lo que hacemos durante el partido tiene su efecto en el resultado final», comenta el head coach de la franquicia de Michigan.
Que los Pistons tienen margen de mejora es innegable, pero de igual modo está claro que la actual racha no será fácil de romper. La acumulación de derrotas en línea que viven en estos momentos es la más larga en una sola temporada en la historia de la franquicia, coincidiendo además con la más larga de la NBA desde que los Houston Rockets perdieron 20 seguidos en 2020-21. El mayor número de choques seguidos en los que Detroit ha mordido el polvo se dio con 21 entre el final de la temporada 1979-80 y el inicio de la 1980-81.
Echando un ojo al calendario que tienen a continuación, parece difícil que el ansiado triunfo legue en breve. Juegan dos veces con Philadelphia 76ers antes de verse las caras con Milwaukee Bucks y Atlanta Hawks, siendo tres de estos choques en la carretera. Por cierto, los de Pensilvania tienen el récord absoluto con 26 derrotas consecutivas en el curso 2013-14 y otras 28 entre el final del 2015-16 y comienzo del 2016-17. Los Pistons se aproximan peligrosamente a batir tales marcas.
A la espera de ver resultados colectivos, la realidad es que Cade Cunningham está haciendo los mejores números de su aún corta carrera con un promedio de 22 puntos y 7,3 asistencias, y que Ausar Thompson ha comenzado su camino como novato con paso firme. Hay cosas a las que agarrarse para ir mejorando poco a poco.
(Fotografía de Gregory Shamus/Getty Images)