El espléndido arranque de temporada de los Golden State Warriors ha impulsado de regreso a la franquicia a la categoría de contenders tras dos años de transición. Stephen Curry y Draymond Green están exhibiendo un alto nivel de juego que contagia al resto del equipo en ambos lados de la cancha.
La 14ª selección del draft de 2021, Moses Moody, ha confirmado que esta intensidad mostrada en la pista en tan solo una réplica de cada una de las sesiones de entrenamiento realizadas por los de Steve Kerr, donde tanto Curry como Green emergen como dos líderes muy exigentes.
«Tenemos a dos killers en nuestro equipo», afirmó el rookie en el podcast Multiverse del medio ClutchPoints. «Son tan competitivos en los entrenamientos como en cualquier otro momento. Esos muchachos ni siquiera necesitan estar en la cancha. Siempre que estamos jugando, ellos lo hacen con la misma fuerza, incluso cuando están con los entrenadores en el banquillo. Es un entorno muy competitivo dentro de un grupo de grandes competidores. Y yo encajo perfectamente.»
Ser un novato dentro de uno de los mejores equipos de la liga conlleva una serie de ventajas de la que pocos jugadores de primer año suelen disfrutar. Los Warriors disponen de una gran cantidad de veteranos y estrellas consumadas de los que Moody puede absorber mucho conocimiento del juego en la NBA. Algo que resultará clave para su desarrollo como jugador, dentro y fuera de la cancha.
(Fotografía de portada de Cole Burston/Getty Images)