Zion Williamson está en el mejor momento de su aún corta carrera. Olvidados los problemas físicos, la estrella de New Orleans está demostrando que si está en forma es básicamente imparable. Anoche, recibiendo a Phoenix, 35 puntos para llevar los suyos hasta el triunfo en la prórroga por 129-124 y asentarles en la primera plaza de la Conferencia Oeste con un balance de 18-8.
Como era de esperar, el partido contra los Suns fue realmente duro. Ambos equipos están en la élite de la NBA y lo demostraron pese a contar con importantes bajas (Brandon Ingram en los locales y Devin Booker en los visitantes). En el primer tiempo los de Arizona fueron mejores y gozaron de ventajas que rozaron la decena de puntos; sin embargo, la alegría les duró poco, ya que su rival rápidamente cerró la diferencia y en el tercer cuarto apretó para irse hasta 15 puntos arriba. Parecía que los Pelicans, con Zion al mando, controlaban el encuentro, pero nunca puedes fiarte de un equipo como Phoenix. Así, merced a un parcial de 13-2, pasaron de perder por 11 puntos a ocho minutos del final a estar solo uno abajo con menos de cuatro minutos en el electrónico. Pese a tal reacción, parecía que la victoria sería para New Orleans hasta que Chris Paul (abucheado constantemente por el público) forzó la prórroga.
Se esperaba un tiempo extra apasionante, pero no lo fue tanto. Phoenix perdió a DeAndre Ayton por seis faltas justo antes de los cinco minutos definitivos, y al poco de empezar era Chris Paul quien debía abandonar el parqué por el mismo motivo. Los árbitros señalaron falta de Zion en un triple intentado por el veterano base, pero el banquillo de los de Luisiana pidió challenge y los colegiados cambiaron su decisión. Ahí concluyó la batalla. Los Pelicans se marcharon en el marcador y sumaron su séptima victoria consecutiva con un Williamson abonado a dar espectáculo. Pasen y vean.
«Los Suns se han ganado su currículum; son un gran equipo. Por ello, es muy importante para nosotros conseguir dos victorias consecutivas contra ellos; es algo que alimenta nuestra confianza», expresa Willie Green, head coach de New Orleans.
Zion Williamson brilló con 35 puntos (incluyendo dos triples en tres intentos) a los que añadió ocho rebotes y tres asistencias, pero no fue el único que tiró del carro. C.J. McCollum se marchó hasta los 29 puntos y, ya desde el banquillo, Naji Marshall aportó 16 tantos y Larry Nance Jr. otros 15. Todo parece funcionar por Luisiana.
28 para DeAndre Ayton
DeAndre Ayton acabó expulsado, pero mientras estuvo en pista fue quien más daño hizo a los Pelicans; tanto es así que concluyó su actuación con 28 puntos, 12 rebotes (seis ofensivos) y 5 asistencias. Su gran presentación estuvo acompañada por 27 puntos de Mikal Bridge y otros 17 de Cameron Payne. Fue insuficiente para que los Suns evitasen la que fue su quinta derrota en los últimos seis encuentros. Chris Paul, quien se quedó en 6 puntos y 11 asistencias, entiende que no es momento de entrar en pánico.
«Deja que simplemente pase. Date cuenta de que es una temporada muy larga. Definitivamente sabemos que tenemos que mejorar y corregir algunas cosas, pero todavía no se trata de conseguirlo o morir», sentencia.
(Fotografía de Harry How/Getty Images)