Tras la lesión de Joel Embiid es obvio que Philadelphia necesitaba un impulso. Sustituir al vigente MVP de la NBA es imposible a nivel de estadísticas e impacto en el juego, pero al menos hacía falta que alguien recordase constantemente que hay que seguir luchando sobre el parqué. Pues bien, ese ha sido Kyle Lowry.
El veterano base llegó al equipo como agente libre mediado el mes de febrero tras rescindir con Charlotte Hornets. Siendo un viejo conocido del entrenador de los 76ers, Nick Nurse, con quien ganó el anillo de 2019, se esperaba que fuese importante en el equipo, pero quizás no tanto como se está viendo.
Con una cultura ganadora instalada en su ser, Lowry se ha hecho con el puesto de base titular y está firmando muy buenos partidos. Ante los Hornets hizo un doble-doble de 15 puntos y 10 asistencias y frente a Dallas, pese a no estar bien en el tiro, aportó 7 asistencias por ninguna pérdida. Sí, es un líder sobre el parqué, pero es que además ha posibilitado que dos piezas como Cameron Payne y Kelly Oubre Jr. trabajen de manera eficiente desde la segunfa unidad. Así lo explica Nurse.
«Como he comentado a los propios jugadores, el plan iba desde hace tiempo en esta dirección para intentar establecer una combinación diferente en la pista. Creo que tal vez la combinación de Cam Payne y Kelly desde el banquillo sea un buen dúo para esa segunda unidad. Estoy intentando llegar a ese punto», expresa el head coach.
(Fotografía de Tim Nwachukwu/Getty Images)