¿Ironía, sarcasmo o fe narcisista?
Oír hablar a Nick Young es una auténtica delicia tanto para periodistas como para fans con deseos de dibujar una sonrisa fácil. Sus declaraciones suelen ser oro.
El escolta de los Lakers está teniendo escaso protagonismo esta temporada en el andar de su equipo, perdiendo incluso ese estatus de microondas desde la segunda unidad que ejercía a menudo y con acierto la temporada pasada.
Este año su aportación se está viendo encorsetada por el minutaje; 19,6 minutos le está dando Byron Scott para que éste acumule 9,2 puntos y 1,6 rebotes, sin alcanzar siquiera la asistencia por partido. En tino hablamos de 41,1% y 39,8% en tiros de campo y triples respectivamente. Guarismos muy flojos que no ensombrecen la confianza de Swaggy P.
Serena Winters, de Lakers Nation, recoge las hilarantes reflexiones del jugador: «Voy a decirle al Comisionado que ojee un par de mis partidos y que debería estar nominado para ‘Jugador Defensivo del Año’, y si no me la habrán jugado como a Drake [el rapero] con su ‘Hotline Bling’ en los Grammys».