No fue una buena noche para los Nuggets. La organización de Colorado se enfrentaba a uno de sus grandes rivales de la Conferencia Oeste, Utah Jazz, y sabían que tenían un gran reto por delante, más aún jugando en Salt Lake City. Pelearon por la victoria, pero finalmente no pudieron lograrla y, por si ese no fuese suficiente motivo de malestar, perdieron por el camino a Nikola Jokic, quien solo pudo jugar 15 minutos.
El actual MVP de la NBA tuvo que abandonar la cancha en el segundo cuarto tras un golpe con Rudy Gobert. El center francés estaba realizando una acción en la línea de fondo cuando su rodilla chocó con la del serbio. Inmediatamente Jokic cayó y se sujetó la articulación derecha mientras hacía gestos de ostensible dolor. Denver lo listó rápidamente como duda para volver al partido. Pese a tal anuncio, se le pudo ver en el descanso calentando con sus compañeros; sin embargo, habló con Mike Malone y se decidió que no jugase la segunda parte del encuentro.
«Dijo que se siente un poco débil, y simplemente decidí que no jugase. Yo tomé la decisión, no es su decisión. Lo que he aprendido sobre Nikola es que, si le dejas, jugará siempre. Así que a veces tengo que tomar decisiones por él. No tiene sentido para mí hacerle jugar la segunda mitad cuando me dice se siente un poco débil. Y eso es algo aplicable cualquier jugador… Simplemente no tenía ningún sentido que Nikola siguiera en pista en una segunda noche de back-to-back pudiendo sufrir daños adicionales», explica el entrenador jefe de Denver.
Sobre cómo de importante puede ser el problema, por ahora todo ha quedado en una contusión en la rodilla derecha. Malone entiende que no será nada importante, pero desconoce si será necesario hacerle pruebas adicionales. «Realmente no he tenido la oportunidad de hablar con el equipo médico todavía, pero no creo que sea algo demasiado serio», sentencia.
Volviendo al partido, lo cierto es que pese a no contar con Jokic los Nuggets dieron guerra hasta el último cuarto. Entraron al mismo perdiendo por un solo punto (91-90), pero un parcial de 19-6 a favor de los Jazz les dejó sin opciones. Aunque solo jugó 15 minutos, Jokic fue el máximo anotador de los suyos con 24 puntos. Tras él quedaron Will Barton con 21 y Aaron Gordon con 20.
Utah y la fortaleza del conjunto
Los Jazz por su parte se mostraron una vez más como un equipo. El máximo anotador fue Rudy Gobert, quien acabó con 23 puntos y 16 rebotes; la cuestión es que junto a él hubo hasta otros seis jugadores en dobles dígitos de anotación (Donovan Mitchell logró 22 y Jordan Clarkson aportó 19 desde el banquillo). Utah está ahora 3-0 y parece lanzado a reeditar su gran regular season del curso pasado.
«Cuando compartimos el balón en ataque, nuestra defensa mejora. Me gusta cuando eso sucede y es justo ahí cuando jugamos nuestro mejor baloncesto», comenta el pívot francés.
(Fotografía de Dustin Bradford/Getty Images)