Lejos de poner solución a sus problemas, los Warriors parecen hacerlos más grandes cada día. Una derrota por casi 40 puntos, abucheos del Chase Center y la caída a 1,5 partidos de distancia de los puestos de play-in han sido los ingredientes que han hecho que la de esta madrugada se convierta seguramente en la peor jornada del curso para los de Kerr. La peor jornada… de momento.
El conjunto de San Francisco cayó por 105-141 ante unos Pelicans que ni siquiera necesitaron tener a sus estrellas demasiado tiempo en pista para pasarles por encima. Ninguno de los integrantes de la plantilla de Willie Green llegó a estar 30 minutos sobre el parqué, pero no hizo falta para que la diferencia en el marcador llegase a los 25 puntos en la primera parte y a los 41 en la segunda. Y ante algo así, la desesperación se hizo notar.
¿Curry pide movimientos?
«Es obvio que mantener las cosas como están sería una absoluta locura. Es absurdo hacer lo mismo y esperar diferentes resultados» reconoció Stephen Curry. «Estamos en un punto en el que estamos tratando de entender qué pasa y qué necesitamos cambiar para mejorar. Hablamos de ello durante los partidos, en las sesiones de vídeo, en el vestuario… Pero vamos en la dirección contraria. No sé qué decir, no estamos acostumbrados a convivir con esta sensación».
A estas alturas, la pregunta para Golden State no parece tanto cómo se puede salvar la temporada, sino si esta tiene salvación. Curry, con un 4/13 en tiro, volvió a firmar un partido muy pobre, y esta vez, salvo por los 21 puntos de Moses Moody, no hubo nada positivo a lo que agarrarse. Y lo cierto es que si aquello a lo que hay que agarrarse es a una buena noche de Moses Moody, es que el equipo está pendiendo de un precipicio.
NOLA, por el contrario, vio a ocho de sus jugadores llegar a los dobles dígitos en anotación en la que fue su sexta victoria en los últimos siete partidos, un excelente tramo que le ha permitido volver a encaramarse a puestos de acceso directo a playoffs. Pese a que la frecuencia de sus problemas físicos sigue dejando alguna duda sobre su potencial, noches como esta recuerdan lo alto que está su techo cuando toda la plantilla está disponible, y la tendencia positiva de las últimas semanas invita al optimismo con respecto a sus opciones.
Jonas Valanciunas terminó el choque como máximo anotador con 21 tantos, seguido por los 19 de Zion Williamson. Ambos evidenciaron las carencias de los Warriors en la pintura, atacando el aro una vez tras otra con mucha efectividad y sumando fácilmente puntos con los que abrir una brecha cada vez más difícil de curar.
(Fotografía de portada: Ezra Shaw/Getty Images)