Jusuf Nurkic ha establecido esta madrugada un nuevo récord histórico para los Suns. El bosnio se ha convertido en el jugador que más rebotes ha capturado en un partido con la camiseta de Phoenix al hacerse con 31, convirtiéndose a su vez en el segundo hombre en sumar tantas capturas en el siglo XXI igualando la marca establecida por Kevin Love en el año 2010.
La mejor marca jamás firmada por los de Arizona estaba establecida en 27, cifra que compartían Paul Silas, que fijó el récord en 1971, y Tyson Chandler, que lo igualó en 2016. No obstante, a diferencia de ellos, Nurkic no consiguió acompañar su logro con una victoria, pues los de Frank Vogel cayeron ante Oklahoma City Thunder por 110-118.
Jusuf fue preguntado por este hito al terminar el encuentro, y, lejos de mostrarse orgulloso por lo conseguido, reflejó una notable frustración con la forma en que había sido tratado por los árbitros: «Estoy intentando hacer mi trabajo lo mejor que puedo, pero es complicado cuando coges 13 rebotes ofensivos, tiras 16 veces a canasta y no te dan ningún tiro libre. Creo que me hacen tantas faltas como a cualquier otro».
«No estoy diciendo que hayamos perdido por eso, pero no me parece lógico. Pero bueno, estas cosas pasan. No es la primerea vez y por desgracia tampoco será la última».
Shai marca el ritmo
El dominio del pívot bajo los tableros no valió sin embargo para compensar el dominio de Shai Gilgeous-Alexander en el resto de facetas. El base firmó 35 puntos, 9 asistencias y 8 rebotes para hacerse amo y señor del partido, especialmente en un último cuarto en el que llegaron 11 de sus tantos y en el que se encargó de evitar un descalabro. Los visitantes, que se habían puesto 24 arriba, dejaron escapar su ventaja y se vieron contra las cuerdas, pero la irrupción del canadiense les devolvió el control e hizo estéril el esfuerzo de los Suns por volver al partido.
(Fotografía de portada: Christian Petersen/Getty Images)