Mes ligero, anécdotas a la sazón. Es periodo vacacional en la NBA. Mientras la mitad del mundillo —dígase directivos encorbatados, rookies ilusionados y undrafted desesperados— aún curra a destajo, el otro cincuenta por ciento desconecta. Y algunos incluso se casan.
Boda rosa
Es el caso de Harrison Barnes. El jugador de los Dallas Mavericks se ha hecho mayor a pasos agigantados. Compromiso multimillonario con los tejanos el año pasado, compromiso con Britt Johnson de por vida y que preferimos no entrar a tasar.
Entre los invitados, Stephen Curry, Kyrie Irving y muchas ganas de parranda. Entonces, adentrado el convite, el DJ lanzó un tema; no sabemos si de manera casual o como fruto de alguna petición personal. El caso es que vino al dedillo para la performance que se pudo ver a continuación. Os ponemos en situación.
LeBron James, asiduo consumidor de Instagram, gusta de rapear en vivo los hits que más escucha en cada momento. Sus InstaStories se reproducen como larvas en un manglar. Un post suyo del 15 de junio ha traído cola. Rapado al cero y medio, no se reprimió lo más mínimo con el tema First Day Out de Tee Grizzley. Y ahí arrancó la plaga viral.
Nacía el #LeBronJamesChallenge, consistente, lógicamente, en imitar a la estrella de los Cavs en su particular videoclip. Youtube se ha llenado de réplicas de imitadores, algunas geniales —realmente hay un buen rato de ensayo detrás de la primera—, e incluso contagiando a un NBA como Giannis Antetokounmpo.
Pero, como indicamos en el titular, el griego no ha sido el único jugador profesional alcanzado por el fenómeno. En pleno protocolo de divorcio entre Irving y los Cavaliers —y con LeBron como presunto causante— sucede que Stephen Curry, que se ríe hasta de su sombra, vio el banquete de Barnes y contar a Irving entre su público como el momento y lugar perfecto para hacer su aportación personal al #LeBronJamesChallenge.
Steph making fun of LeBron’s workout video with Kyrie egging him on ??? (via ryanonlyryan/IG) pic.twitter.com/fBj7idGzWA
— Sports Illustrated (@SInow) 30 de julio de 2017
Fina línea
Las cosas como son. El verano deportivo norteamericano es largo, y resulta mucho más entretenido con Curry añadiendo un poco de gasolina a una situación que amenaza realmente con arder en cualquier momento.
Porque, si bien ver en un ambiente festivo a un Irving a carcajada limpia merced a una parodia realizada a LeBron, además cincelada por uno de sus álter ego, Curry, tiene su toque de humor, la gracia desaparece cuando la posibilidad de que el segundo mejor jugador de Cleveland abandone el buque se torna más seria que nunca.