Lograr 40 puntos en un partido sería un escándalo para cualquier jugador de la liga que no se apellide James, Davis, Curry, Harden o Durant. Y, por supuesto, que tampoco estemos hablando de un tal Russell Westbrook, habituado a este tipo de actuaciones como si fuera otro día más en la oficina.
El ‘todocampista’ de los Thunder anotó 40 puntos en la victoria de los Thunder ante los Suns por 102-118. Lo mejor es que de ese tomo de tantos, 15 fueron durante los últimos seis minutos y medio de partido. Osea, cuando se están jugando los cuartos. Westbrook se maneja como pocos en este tipo de situaciones y, cuando acabó el encuentro, él mismo quiso destacar el trabajo defensivo que habían realizado, lo que hizo crecer sus opciones de cosechar el triunfo.
«Nos estamos apoyando mucho en nuestra defensa durante todo este curso. Y es importante que sigamos haciéndolo para poder seguir ganando», relataba el jugador. Esta vez no tuvo a su lado a Paul George, fuera por problemas físicos, pero sí tuvo a Dennis Schroeder, quien anotó 14 de sus 20 tantos en el último cuarto.
«Hoy hemos defendido realmente bien», esgrimía un feliz Billy Donovan, técnico de Oklahoma. «También hemos podido rebotear bien, cuidar de nuestra canasta y ser capaces de anotar bastantes puntos».
En el lado de los Suns, Devin Booker volvió a tomar las responsabilidades anotadoras del equipo y logró 25 puntos y 10 rebotes. T.J. Warren acabó con 19 puntos, y DeAndre Ayton con 16.
«Tenemos que estar contentos con los tres cuartos que hemos jugado a un gran nivel, y cómo hemos competido en ellos», señalaba Igor Kokoskov, entrenador de Phoenix. «Lo malo es que estos partidos duran 48 minutos».
(Fotografía de portada de Ezra Shaw/Getty Images).