ENVIADO ESPECIAL / SEVILLA Tras las buenas sensaciones que dejó el primer partido del Mundial en Argentina, la derrota ante Croacia ha dolido en la albiceleste. Uno de sus líderes, Pablo Prigioni, explica que les faltó tranquilidad. «El equipo dio el máximo e hizo un buen juego. Lo teníamos para jugar con más calma pero es difícil mantener el equilibrio y la tranquilidad para lograr alguna racha para que al menos les entrasen dudas».
Sobre el hecho de jugar sólo 18 horas después de la victoria ante Puerto Rico, el base de Argentina no quiso poner tal circunstancia como excusa. «Yo no me he sentido ni mejor ni peor que ayer, simplemente ha sido un partido diferente».
Sin tiempo para lamentos
Dolido aún por la derrota, pero sabedor de que el campeonato no ha hecho mas que empezar, Prigioni piensa ya en el siguiente partido, el cual ve como indispensable de cara a la clasificación para la segunda fase. «El partido de mañana ante Filipinas es clave para nosotros, hay que dar la vida para ganar«.