No hay mejor manera de recuperarse de una derrota por 30 puntos que ganar el siguiente partido por una diferencia similar. Los Houston Rockets pagaron los platos rotos de San Antonio y los Spurs se impusieron por 130–99 en el duelo de dos de los tres equipos de Texas.
LaMarcus Aldridge fue el mejor de los locales con 25 puntos y 10 rebotes, Danny Green aportó 18 puntos con 6 de 8 en triples, Kawhi Leonard también 18 puntos y San Antonio repartió un total de 32 asistencias como equipo para demostrar que lo del lunes ante Golden State quieren dejarlo atrás.
“Estábamos muy motivados. Un poco enfadados por lo del otro día, pero tienes que olvidarlo tan pronto como puedas y aprender de ello”, dijo Tony Parker, autor de 15 puntos y 7 asistencias.
Por los Rockets, que venían de tres victorias consecutivas, el mejor fue James Harden con 20 puntos. Dwight Howard, duda hasta última hora, solo pudo disputar 22 minutos en los que consiguió 13 puntos, 8 rebotes y 2 tapones.
34 victorias seguidas en casa
Los Spurs han ganado sus primeros 25 partidos de la temporada en el AT&T Center y ya acumulan 34 victorias consecutivas en su pabellón contando desde la temporada pasada. Es la séptima mejor marca de la historia en este aspecto, pero cada vez más cerca del récord, en manos de Chicago Bulls con 44 triunfos seguidos en el United Center entre 1995 y 1996.
Además, la de anoche fue el triunfo número 17 de San Antonio esta campaña superando al rival por al menos 20 puntos, la mejor marca de la NBA este año.