Un triple de Paolo Banchero a falta de 01:26 minutos para el final más dos tiros libres posteriores permitieron a Orlando Magic acabar con los New York Knicks por un ajustado 106-111.
«Fue la jugada correcta. Me la dieron en la esquina y tenía que lanzar», admitió el novato al medio ESPN.
Cole Anthony agregó 18 puntos desde el banco; Wendell Carter Jr. obtuvo 16 tantos y 8 rebotes, y Franz Wagner sumó otros 16 puntos antes de retirarse por lesión en el cuarto periodo.
En los Knicks frustración en general y de Julius Randle en particular, quien protagonizó varias protestas con los árbitros del encuentro, técnica incluida, y tuvo un gesto muy feo con su compañero Quickley.
«Todo el mundo está intentando ganar. Eso es todo lo que puedo decir al respecto. A veces pasan esas cosas», explicó el base de Kentucky.
Quentin Grimes y Quickley fueron los máximos exponentes de los Knickerbockers con 25 puntos cada uno; el citado Randle obtuvo 23 tantos y 9 rebotes, y un desacertado R.J. Barrett se quedó en solo 10 puntos mediante un 3/12 en el lanzamiento.
Con Jalen Brunson fuera por lesión (esguince mano derecha) y con Randle sentado en el banquillo durante gran parte del segundo cuarto, los neoyorquinos estuvieron hasta 19 puntos abajo que se encargaron de recortar distancias gracias a un parcial de 23-4 que les permitió empatar el partido 79-79 a finales del tercer periodo.
Sin embargo, los Magic abrieron los últimos doce minutos del encuentro con sendos triples de Cole Anthony y Gary Harris, y nunca más estuvieron por detrás en el electrónico.
«Esta noche hemos encajado 36 puntos en el último cuarto. Eso no es lo que somos», destacó Quickley.
«Salimos de nuestro agujero en el tercer cuarto, y luego al principio del último jugamos muy mal», admitió Tom Thibodeau. «En el tercer periodo nuestra defensa nos permitió jugar a campo abierto. Conseguimos algunas canastas fáciles. Eso nos ayudó mucho, pero empleamos tanta energía en remontar que al final nos quedamos cortos de energía», explicó.
Otros destacados
Knicks: Jalen Brunson causó baja de última hora debido a un esguince en su mano derecha, tal como informaron los servicios médicos de los Knicks.
Mitchell Robinson, duda hasta última hora por unas molestias en su rodilla, finalmente sí jugó obteniendo 2 puntos, 12 rebotes y 3 tapones en media hora de juego.
Tras dos derrotas seguidas ante Miami y Orlando, los Knicks se la juegan en las próximas jornada ante Houston, nuevamente Miami He, y Cleveland Cavaliers el 1 de abril para sus futuras aspiraciones en los playoffs. Siguen quintos del Este con un 42-33, y los de Eric Spoelstra ahora son sextos (40-34).
Magic: El base Jalen Suggs causó baja por cuarto partido consecutivo debido a una conmoción cerebral. Sus promedios este curso están siendo de 9,7 puntos, 3 rebotes y 3,2 asistencias en 23,7 minutos por jornada.
(Fotografía de portada: Jonathan Bachman/Getty Images)