Tras estar fuera desde el pasado octubre, Patrick Williams suma ya cinco partidos desde su regreso a la disciplina de los Chicago Bulls. Su vuelta se da en el quizás peor momento de la temporada del equipo, que suma once derrotas en los últimos 15 partidos. Los Bulls tenían la esperanza de que Williams les ayudase a revertir la situación, pero aún le cuesta ser relevante y ayer finaliza el encuentro jugando 12 minutos en los que ni siquiera lanzó a canasta.
Los minutos en cancha han ido decreciendo desde su regreso y, aunque Williams dice no saber por qué, prefiere desviar las críticas hacia sí mismo. «No es mi trabajo decidir cuándo juego. Mi trabajo es estar preparado cuando digan mi nombre, y debo hacer una mejor labor» decía el jugador todavía frustrado por la derrota y el mal partido individual. «Los minutos no son tan importantes como lo que haces con ellos. Obviamente, no he sido todo lo agresivo que me gustaría. Puedo hacerlo mejor en defensa, reboteando o corriendo la cancha. Lo demás vendrá como consecuencia de esto, incluidos los minutos».
Por lo poco que se pudo ver a inicios de temporada, no es que los Bulls demandasen de Williams un gran volumen de lanzamientos. Su principal tarea estaba en el apartado defensivo. Pero debe lanzar los tiros liberados para no ser una rémora para sus compañeros. Difícilmente puede ser una pieza importante en Chicago lanzando tres tiros por partido y anotando tres puntos de media como hace desde su regreso.
(Fotografía de portada de Jonathan Daniel/Getty Images)