Los Angeles Clippers necesitarán a su dúo estelar en plena formara para luchar por un anillo que aparentemente se pagará muy caro. Sin embargo, son precisamente los problemas físicos los que se han erigido como el principal obstáculo para los angelinos.
Paul George regresó esta pasada jornada tras una ausencia de dos partidos debido a un dolor en su pie derecho. El alero disputó un total de 32 minutos en la derrota ante los Denver Nuggets, en los que solo pudo anotar 17 puntos con una carta de lanzamiento de cinco aciertos en 15 intentos. Tras el duelo reconoció seguir sintiendo molestias, lo que pudo haber afectado a su rendimiento durante el mismo.
«Es un proceso que va poco a poco», señaló el siete veces All-Star. «Ahora mismo estamos tratando de superarlo. No parece haber desaparecido así que en este punto se trata de controlar el dolor y la hinchazón. Hay que saber lo que se puede y no se puede hacer. Ser inteligente. Si fuera por mi, desearía estar en la cancha y jugar todos los partidos. Pero algunos días duelen más que otros, así que miras hacia el futuro y planificas cada paso con antelación.»
Así, la postura desde el cuerpo técnico ha sido apostar por la cautela y la dosificación, aún sabiendo que es muy posible que el dolor se prolongue durante lo que resta de temporada. «Es algo que tendremos que resolver. No puedo flexionar ese dedo. Lo más importante es que si puedo jugar con un mínimo de dolor, lo haré. Pero es algo a lo que tendremos que hallar una solución.»
El técnico Ty Lue confirmó que ha aplicado una restricción de minutos sobre Paul George, aunque las molestias persisten a pesar de evitarse cualquier tipo de sobrecarga. El único punto positivo es que ahora los Clippers afrontarán dos días libres consecutivos de descanso por primera vez en semanas antes de volver a la carga este domingo contra Los Angeles Lakers.
(Fotografía de portada de Harry How/Getty Images)