Definitivamente los Sixers han encontrado el rumbo. Tras un comienzo de campaña dubitativo, los chicos de Doc Rivers están viviendo su mejor momento y anoche lo certificaron venciendo a los Raptor por 104-101 tras prórroga.
Philadelphia sumó su quinta victoria consecutiva ante los canadienses, pero no fue nada sencillo. Aunque durante casi tres cuartos gozaron de rentas que superaron los diez puntos, llegados al último todo cambió. Toronto igualó el marcador y terminó forzando el tiempo extra con una canasta de Pascal Siakam a la que Joel Embiid no pudo responder. Ya en los cinco minutos de añadido se vivió una cadena de errores por parte de ambos; tanto es así que Tobias Harris puso por delante a los 76ers con más de dos minutos por jugar y el marcador no volvió a moverse.
El máximo anotador de los de Pensilvania fue Joel Embiid con 28 puntos a los que añadió 11 rebotes; sin embargo, fue el propio pívot quien puso el foco sobre su compañero Harris, quien logró 21 tantos con un 5 de 7 en triples. «Es una estrella en su papel. Eso es lo que ha estado haciendo durante toda la temporada, convertir tiros importantes», comenta sobre el lanzamiento que les terminó por dar el triunfo.
Lo cierto es que a los Sixers les está viniendo realmente bien estar en casa. Se encuentran inmersos en la mayor racha de partidos como local (siete) y por ahora han ganado los cinco primeros. Los siguientes equipos en visitarles serán Detroit Pistons y Los Angeles Clippers.
Volviendo a las actuaciones individuales, quien estuvo algo más apagado esta vez fue James Harden. Tras firmar algunos encuentros realmente brillantes, el guard se quedó en 14 puntos, ocho asistencias y siete rebotes.
38 para Siakam
Pascal Siakam fue sin duda la gran oposición a los Sixers. La estrella de los Raptors logró 38 puntos, pero no pudo evitar la que es ya la sexta derrota consecutiva de los suyos. También es verdad que le faltó ayuda, y es que Fred VanVleet no pasó de los 13 puntos con un doloroso 3 de 15 en tiros de campo. Nick Nurse cree que no jugaron mal, pero les faltó acierto.
«Me gusta cómo fuimos capaces de aguantar al inicio del partido… pero nos acabó faltando hacer un poco más. Creo que creamos algunas oportunidades de tiro realmente buenas. Probablemente no fuimos recompensados con el porcentaje de tiros que merecíamos tras crear muy buenas situaciones para ello», sentencia el head coach de la organización de Canadá.
(Fotografía de Tim Nwachukwu/Getty Images)