Phoenix subraya su candidatura venciendo en Milwaukee

¿Es Phoenix Suns un aspirante al anillo? La clasificación dice que sí, pero no por ello han parado de sonar voces que prácticamente lo descartan o que al menos lo sitúan por debajo de otros cuatro o cinco equipos en la Conferencia Oeste. Pues bien, ese equipo al que no se dan casi opciones ganó anoche a los Bucks en el que fue un auténtico partidazo.

Con cuatro jugadores alcanzando la veintena de puntos y un Devin Booker decisivo, los de Arizona supieron resistir cuando Milwaukee amenaza con poner tierra de por medio en el marcador para acabar dando el último golpe, el definitivo. Booker, autor de 24 puntos, 7 rebotes y 7 asistencias, primero logró la canasta que forzaba la prórroga y después el tiro libre que certificaba la victoria en el tiempo extra (quedaban tres décimas para el final). Fue un partido vibrante, uno entre dos de los mejores equipos de la NBA.

Junto al escolta, como decíamos, nadie falló en Phoenix. Mikal Bridges logró 21 puntos con un 5 de 7 en triples, DeAndre Ayton firmó un doble-doble de 20 puntos y 13 rebotes, y Chris Paul hizo lo propio con 22 puntos y 13 asistencias. Poco más se podía pedir a unos Suns en los que hasta el banquillo funcionó. Monty Williams, head coach del equipo, lo definió como un partido de postemporada. «Tuvo todo lo que te puedes encontrar en los playoffs. Emoción. Físico. Jugadores haciendo jugadas increíbles. Acciones importantes en los últimos instantes. Tuvo todo eso».

A título individual, el encuentro sirvió a Chris Paul para dar un nuevo paso en la historia y alcanzar las 10.145, cifra que le permitió superar a Magic Johnson (10.141) y convertirse en el quinto jugador que más pases de canasta ha repartido en la NBA. El veterano base señaló que era algo increíble. «Nunca habrá otro Magic. El Showtime, ¿sabes a qué me refiero?», comentaba al respecto.

Phoenix jugó muy bien, pero Milwaukee tampoco se quedó atrás. Giannis Antetokounmpo acabó con 33 puntos y 8 rebotes, pero no pudo acabar el partido. Una especie de calambre le hizo abandonar la cancha para no poder disputar los últimos cuatro minutos de la prórroga. Quizás con él en pista hubiesen ganado.

«En ese momento no sabes qué es. Puede ser un calambre. Puede ser una distensión. Es sólo un dolor agudo en la pantorrilla y los músculos se tensan. No supe de inmediato que era un calambre», comenta el griego.

Los Bucks contaron además con 26 puntos y 7 rebotes de Khris Middleton y 25 puntos y 8 asistencias de Jrue Holiday. Perdieron el partido, pero parecen estar entrando en su mejor forma cuando se acerca el momento decisivo de la temporada.

(Fotografía de Christian Petersen/Getty Images)


EXTRA NBAMANIACS

Nuestro trabajo en nbamaniacs es apoyado por lectores como tú. Conviértete en suscriptor para acceder a beneficios exclusivos: artículos especiales, newsletter, podcast, toda la web sin publicidad y una COMUNIDAD exclusiva en Discord para redactores y suscriptores.