Había ganas de ver un nuevo duelo entre Kevin Durant y LeBron James. Estando ambos en la recta final de sus carreras, cada vez que están frente a frente es casi obligatorio sentarse y disfrutar del baloncesto de ambos. Eso hizo seguramente mucha gente, pero el partido entre Suns y Lakers estuvo incluso más marcado por las dudas de dos equipos que siguen en construcción.
Ya sea por cambios en la rotación –algunos obligados por lesiones– o porque simplemente no tienen las cosas claras, la realidad es que se vio un encuentro en el que nadie mostró mando o seguridad, y eso que Phoenix llegó a vencer por hasta 20 puntos.
Sí, los chicos de Frank Vogel salieron mejor y ya en el primer cuarto cobraron la máxima renta de la noche; sin embargo, los angelinos fueron dando mordiscos al marcador hasta colocarse sólo dos puntos abajo poco antes de la finalización del tercer periodo. Para ese momento era más que difícil vislumbrar cómo sería la recta final del partido, algo que terminaría definiendo el rebote ofensivo y los secundarios de los Suns.
En la batalla en la pintura, con Jusuf Nurkic y Anthony Davis como protagonistas, el primero salió vencedor. El pívot de los de Arizona cerró su actuación con un doble-doble de 18 puntos y 22 rebotes (7 de estos ofensivos). En total fueron 14 capturas en ataque de los locales por solo 3 de Lakers. A tal fortaleza interior se unió el hecho de que tanto Royce O’Neale como Grayson Allen lograsen hasta seis triples. Por ahí acabaron perdiendo el choque los californianos.
«Esos tres muchachos fueron las estrellas del partido de esta noche», comenta Frank Vogel sobre Nurkic, O’Neale y Allen, mientras que Kevin Durant, autor de 22 puntos, se centra en el último de estos. «Ha estado haciendo las jugadas correctas durante toda la temporada», sentencia.
La debacle inicial
Más allá de la amplia diferencia en la pintura, el partido estuvo marcado por el desastroso comienzo de los Lakers, quienes encajaron hasta 45 puntos en el primer cuarto, siendo esta la mayor anotación de Phoenix en un cuarto de la presente temporada 2023-24 de la NBA. Así lo lamentaba LeBron James, quien finalizó con 28 puntos y 12 asistencias.
«Un comienzo súper lento por nuestra parte, tanto ofensiva como defensivamente. Recibimos 45 puntos en un cuarto y es una batalla cuesta arriba. A partir de ese momento, jugamos muy buen baloncesto, pero sus jugadores de rol hicieron un buen trabajo lanzando a canasta», explica.
(Fotografía de Christian Petersen/Getty Images)