En su primer partido de playoffs desde 2019, los Golden State Warriors sumaron su primera victoria de la serie ante Denver Nuggets (107-123). Stephen Curry volvía a disputar un partido un mes después, pero partió desde el banquillo. Jordan Poole fue el encargado de liderar el ataque del equipo de la bahía mientras que Curry no tuvo que ser una estrella para que lograsen la victoria.
Poole, uno de los favoritos para el Premio al Jugador Más Mejorado de este año, trasladó su explosiva segunda mitad de la temporada al primer partido de playoffs de su carrera. Anotó 30 puntos, máximo del partido, con un 9 de 13 en tiros de campo. Logró triples profundos, hizo mates y se abrió camino hasta la línea de tiros libres. Poole, una vez más, jugó como una joven estrella.
Las pérdidas de balón lastraron el inicio del partido de los Warriors. Sin embargo, Steve Kerr supo esperar hasta los minutos finales del segundo cuarto para dar rienda suelta a su trío de Curry, Poole y Thompson. Las tres principales fuentes de anotación de los Warriors cerraron la primera mitad con una racha de 18-4 y dieron a los Warriors una ventaja de 58-47 al descanso.
El pívot de los Nuggets, Nikola Jokić, comenzó fuerte, pero se desgastó a medida que avanzaba el juego. Los Warriors confiaron su defensa a Kevon Looney y Draymond Green y no les salió del todo mal. El serbio terminó con 25 puntos, 10 rebotes y 6 asistencias, números por debajo de sus promedios. Los Warriors involucraban constantemente a Jokić en el pick-and-roll y esto parecía cansarlo.
Con Jokić cansado en la segunda mitad, los Nuggets nunca tuvieron oportunidades reales en el último cuarto y los Warriors lograron la victoria. Kerr pudo dar descanso a sus titulares cuando todavía quedaban 3:34 minutos de tiempo reglamentario. Curry terminó el partido con 16 puntos en sus 21 minutos de acción. Thompson registró 19 puntos con 5 de 10 en triples. Ambos equipos tienen un día libre antes de que Golden State vuelva a acoger el segundo duelo de la serie.
Elogios para Green
El partido volvió a evidenciar que Draymond Green es una bestia defensiva. A pesar de no tener el tamaño necesario para defender a Jokić, Green logró utilizar su alto coeficiente intelectual defensivo y sus rápidas manos para hacer del partido del MVP un infierno. Supo leer a la perfección el cansancio físico del serbio para forzar errores impropios de Nikola.
Después del partido, el entrenador de los Warriors, Steve Kerr, habló sobre la increíble actuación de Draymond Green. El entrenador señaló que la defensa de Green a Jokić no fue una sorpresa para él porque, en sus palabras, es un «Hall of Famer». Aunque pueda parecer una hipérbole para algunos, Green en realidad tiene méritos para ser considerado para el Salón de la Fama. Fue una parte clave del equipo de 73 victorias y de los tres títulos durante la era 2015-2018.
(Fotografía por Ezra Shaw/Getty Images)