Se acabó la temporada de San Antonio Spurs, y lo hizo de un modo que quizás no merecían. Fueron 61 victorias en temporada regular y dos eliminatorias en las que mostraron todo su saber y tesón. Pero a la tercera, y en el tercer cuarto, la historia cambió definitivamente cuando el tobillo de Kawhi Leonard dijo basta. ¿Hora de lamentos? No.
«Estoy muy feliz por el grupo. Realmente todo acaba con un solo equipo contento de 30. Cuando acaba el día, todo el mundo ha estado triste en algún momento, pero si tienes medio cerebro, pones las cosas en perspectiva», señala Gregg Popovich en declaraciones recogidas por ESPN.
La satisfacción de Popovich se basa en que esta temporada era la «más desafiante» de las que ha encarado en el banquillo de Texas. Llegaron muchos jugadores nuevos, pero lo más importante, lo que marca su listón, es que era el primer año tras la era de Tim Duncan.
«Sin Tim Duncan y con muchas piezas nuevas, estos chicos lograron ganar 61 partidos y fueron mejorando ha medida que avanzaban los playoffs. Estábamos en un gran momento cuando llegó el ‘Game 1’ con Golden State Warriors. Algo de mala suerte, que nos puede suceder a cualquiera en algún momento de nuestras vidas, y no pudimos dar el último paso. Pero cuando pienso en lo que lograron… Se merecen todo el crédito del mundo».
La agencia libre
Con Jonathon Simmons y Patty Mills acudiendo a la agencia libre, lo cual se suma a la incertidumbre por conocer en qué estado regresará Tony Parker a las pistas, San Antonio tiene varios frentes abiertos de cara al verano. Popovich, fiel a su estilo, opta ser cautos y trazar un plan. «Es algo que dependerá de muchos factores, pero valoramos a todos los jugadores que serán agentes libres. R.C Buford y yo nos sentaremos y elaboraremos un plan con prioridades. No será nada diferente a otros años».