Inesperado resultado en el AT&T Center de San Antonio. Los Spurs perdieron su primer partido de la temporada al caer con claridad ante Utah Jazz por 91 a 106.
Los de Salt Lake City utilizaron su acierto desde la línea de triples para liderar en el marcador desde el primer momento y dar un golpe en la mesa sobre la capacidad que tienen de hacer grandes cosas este año. Los Jazz anotaron 38 y 33 puntos en el primer y último cuarto respectivamente. George Hill, ex de los Spurs, fue el mejor de Utah con 22 puntos, bien secundado por los 19 puntos de Rodney Hood y los 15 de Trey Lyles.
Por los Spurs el mejor fue, como no, Kawhi Leonard, autor de 30 puntos. El alero achacó la derrota al poco esfuerzo defensivo que realizó su equipo, algo en lo que también incidió Pau Gasol, quien logró 8 puntos y 8 rebotes en los 27 minutos que permaneció en cancha. Aparte de Leonard el único jugador de San Antonio que pasó de la decena fue LaMarcus Aldridge con 21 tantos.
Inspirados desde el triple
Los Jazz encestaron triples con un acierto del 88% en el primer cuarto (7/8), consiguiendo más canastas de tres puntos en los primeros 12 minutos que los que habían logrado en cualquier partido de los tres anteriores. Los de Quinn Snyder, quien achacó el acierto a “los dioses del baloncesto”, terminaron con un espectacular 15 de 31 en triples.
Este año no habrá amago de récord
Esta temporada los Warriors se despidieron pronto de la posibilidad de batir dos récords: el de empezar una campaña mejor que el 24-0 del curso 2015-16 y el de terminar un curso imbatidos en casa. Pues bien, a San Antonio le ha pasado lo mismo.
Tras realizar ambos conjuntos una excepcional regular season el pasado año y estar muy cerca de finalizar estableciendo un nuevo récord de resultados como local —40-1 terminaron los Spurs en casa, llegando la primera derrota el 10 de abril—, esta temporada no habrá expectación porque puedan lograrlo.