Quinta seguida de Boston, con unos números de impresión

Tras empezar 0-2, tremendamente tocados por la lesión de Gordon Hayward, los Celtics supieron reponerse y encadenar una serie de victorias consecutivas que les aúpan al puesto más alto del Este. Boston lidera la esta conferencia con un balance de 5-2, tras su triunfo de anoche ante los Spurs (108-94). Además, este triunfo acaba con una racha de once derrotas consecutivas de Boston ante San Antonio.

Los números no mienten

La recuperación meteórica de los Celtics, que han sido capaces de sobreponerse del golpe que supuso la caída en desgracia de una de sus piezas angulares, no sólo se ve reflejada en el 5-2 que les deja como dueños, momentáneos, del Este. Si se escarban un poco los datos, el repóquer de partidos ganados consecutivamente deja un ratio ofensivo para los de Massachusetts de 105,5 por duelo y un ratio defensivo de 91,9, el mejor de toda la liga.

Los Celtics suman y siguen. Ante los Spurs acabaron con esa demoniaca racha en contra que les impedía vencer a los texanos desde marzo de 2011. Fin a más de una decena de noches contra San Antonio saldadas con la cruz de la moneda. Kyrie Irving, 24 puntos, 2 rebotes, 6 asistencias, 1 tapón y 3 robos volvió a ser el dueño del destino de los Celtics.

Precisamente en robos de pelota es donde se está viendo un Irving estelar. Ha conseguido 17 robos en 7 partidos, lo que le da una media de 2,4 por duelo. Manos hábiles para anotar, para dirigir y también para defender. El crecimiento del base en esta faceta puede ser una señal clara del paso adelante dado por todos los jugadores de los Celtics. La mejor temporada de Irving, hasta su llegada a Boston, marcaba un 1,5 en robos, durante la 2012-13, la 2013-14 y la 2014-15. La pasada campaña la cerró con 1,2 robos por duelo.

“No sabíamos dónde estábamos como equipo”

Eso es lo que declaró Al Holford a ESPN tras la victoria del lunes ante los Spurs. Este éxito, primero de Brad Stevens contra Gregg Popovich, después de un 0-8 en contra, es símbolo de un equipo rehecho. “Cuando ocurrió la lesión de Hayward no sabíamos dónde estábamos como equipo. Pero luego sentí que nos habíamos unido. Tratamos de ir día a día, escuchando al entrenador. Nos está guiando de la manera correcta”.

“Brad (Stevens) está trabajando todavía en la rotación. Cada partido es una oportunidad para seguir mejorando y que dependamos el uno del otro. Estamos haciendo un gran trabajo”, añadió un Irving que ha tomado la batuta de unos Celtics que en estos cinco triunfos consecutivos han promediado un rendimiento neto de +13,6.


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