Ray Allen, que próximamente ingresará en el Hall of Fame del Baloncesto, ha concedido recientemente una entrevista al medio CBS Sports. El máximo triplista de la historia de la NBA ha hablado un poco sobre sus inicios en la competición, siendo seleccionado por Minnesota Timberwolves en la posición número 5º del Draft 1996, pero inmediatamente traspasado a Milwaukee Bucks.
El escolta formado en la Universidad de Connecticut atesora un promedio de carrera del 40% desde el triple. Asimismo, disputó 1300 partidos oficiales (1149 como titular) con unos números de 18,9 puntos, 4,1 rebotes y 3,4 asistencias en 35,6 minutos sobre el parquet.
«Cuando George Karl llegó al banquillo (Seattle), empezamos a jugar mucho más rápido», señaló Allen. «Y si teníamos un buen lanzamiento, entonces lo asumíamos. Pero al principio de mi carrera muchos de mis entrenadores me decían: ‘Si lanzas desde el triple, no tienes que conformarte. Te estás conformando’. Ahora esto ha cambiado mucho», señaló.
La NBA, en constante evolución, se inclina en la actualidad hacia el Small ball donde prácticamente todo el quinteto tiene la habilidad para lanzar desde el exterior, y la figura clásica del pívot tal como la conocíamos tiende a desaparecer. En la época de Allen, sobre todo en los 90, todo era muy diferente. Más dureza, defensas más férreas, más juego por dentro, pívots rocosos…
«No quiero que la liga vaya solo en esa dirección. Me gusta ver a los pívots, que jueguen al poste y que de vez en cuando jueguen de dentro hacia fuera. Es genial ver a tantos tiradores, pero no quiero ver malos porcentajes», explicó.
Allen, que anotó 2973 lanzamientos desde el triple en sus 18 años como profesional, su récord quedará en pura anécdota próximamente con el ritmo de anotación exterior que tienen algunos en la actualidad, tales como Stephen Curry, su compañero Klay Thompson, James Harden y un largo etcétera.