El que fuera jugador de Knicks y Wizards entre 2016 y 2019, Ron Baker, ha anunciado su retirada del baloncesto a los 28 años. La decisión viene a causa de la hilera de lesiones que han afectado al escolta durante los últimos años. Baker fue una cara reconocible de uno de los peores equipos de la historia de Nueva York, con los que firmó un contrato de 9 millones de dólares por dos años en 2017. Ni siquiera tuvo la oportunidad de demostrar si lo merecía, pues las lesiones comenzaron a minarle hasta poner rumbo a Washington en 2018 después de ser cortado. Solo jugaría cuatro partidos con los capitalinos antes de probar suerte en Europa en el CSKA de Moscú.
Sin embargo, su prematuro fin como jugador profesional no parece que le vaya a separar demasiado del baloncesto. Baker es una figura reconocida en la universidad de Wichita, desde donde informan sobre el futuro del ya exjugador. De hecho ya habría firmado un contrato para ser gestor del departamento de estrategia y negocios del Ascension Via Christi, la cínica sanitaria más importante de Wichita. Él mismo ha declarado que es un puesto que reúne alguna de sus mayores pasiones como son la salud, el negocio y el impacto en las comunidades. Su nueva etapa comenzará el 30 de agosto.
(Fotografía de portada de Abbie Parr/Getty Images)