La vida no siempre acaba en la NBA. Uno de los mejores proyectos de los últimos años de la competición ha terminado por encontrar su camino en Canadá. Royce White, número 16 del Draft de 2012 por los Rockets, se acaba de proclamar campeón de la NBL canadiense. Lo ha hecho con los London Lightning, que suman su tercer título. White rozó el triple-doble en el sexto y definitivo partido ante los Halifax Hurricanes, donde el ala-pívot firmó 34 puntos, 15 rebotes y 9 asistencias. El jugador llegó a Canadá en diciembre de 2016, para el inicio de la temporada 2016/17 y, además de la conquista del campeonato, ha sumado el MVP de la Temporada.
Problemas de ansiedad
A sus 26 años, parece que White puede reconducir su carrera deportiva, la misma que estaba destinaba a tener un sitio de privilegio en la NBA. Tras su único año en la NCAA, en la Universidad Estatal de Iowa, el de Minnesota consiguió formar parte del Mejor Quinteto de la Big 12 y fue nombrado Debutante del Año de esa conferencia. Los Rockets lo seleccionaron el el Draft de 2012 pero tardó más de 600 días en debutar en la NBA y lo hizo con los Kings, en marzo de 2014. En las filas de Sacramento disputó tres partidos, no consiguió anotar y cerró su única etapa hasta la fecha en la mejor liga del mundo.
White arrastra problemas de ansiedad desde su infancia que le bloquean y que no le permiten ser todo lo buen jugador que es. La razón hay que buscarla años atrás, cuando vio en directo cómo un compañero se desplomaba delante suya en un entrenamiento. El hecho de pensar que le podía suceder a él le hizo pasar por episodios de ansiedad que terminaron por sacarle de la NBA. Asociado a todo ello, un pánico a volar
Jugó en la D-League, a la espera de una llamada de los Rockets que nunca llegó, como tampoco lo hizo la de los 76ers, otra de las franquicias con las que probó suerte. A finales de verano de 2015 su nombre apareció asociado a la AmeriLeague, una especie de competición privada que pretendía ser la más fuerte de las ligas menores de los Estados Unidos y que resultó ser un fraude económico.
Las cuestiones de índole mental son algo que la NBA ha tenido como pendiente hasta ahora. Sin embargo la situación puede cambiar, puesto que en el próximo convenio de jugadores que entrará en vigor el 1 de julio la salud mental ya estará recogida como parte de la política de bienestar del jugador e incluso se está trabajando en la contratación de un experto en la materia, según informa thestar.com.