El Oráculo de Amón fue un alto en el camino para Alejandro Magno en su camino a Asia, él le confirmó que era un ser divino, y que además le legitimó como faraón al trono de Egipto. Algo parecido sucede con la marca que dejó para la historia hace 55 años Oscar Robetson, y que hoy pone en peligro el candidato el MVP, Russell Westbrook.
Un ascenso al sitial con una discusión que resonará hasta el final, y en la que lo acompañan Kawhi Leonard, LeBron James y el más cercano a la pelea, James Harden. En esta cruzada, viejos maestros en la carrera del base reconocen su labor hasta la fecha.
«Tienes que tener en cuenta que los Thunder no están teniendo una mala temporada. Tienen mucho talento y ganarán alrededor de 50 partidos esta temporada, y Russell Westbrook es una de esas piezas clave», dijo Scott Brooks a USAToday.
Viejos conocidos
Curioso cuando menos el dato que se reúne en este curso, ya que rondaba 1976 cuando Abdul-Jabbar ganaba el título de mejor jugador de la temporada regular, en unos Lakers que finalizarían sextos de la Conferencia Oeste.
Hace poco más de una década, The Big O quedaba tercero en la lista del MVP, tras Bill Russell y Wilt Chamberlein. «Yo he estado detrás de las cámaras con Russell, y en caso de que no lo gane, estoy seguro de que tiene el carácter para hacerlo. Como ya he dicho, es difícil de discutir sobre un triple-doble [promediarlo]. Para mí eso le coloca como MVP, es difícil decir que no», concluyó el entrenador de los Washington Wizards.
Un motor incansable
«Es el único chico que he conocido que puede jugar un back to back, y en el segundo partido tendrá esos números o incluso mejores, y más energía en el depósito. Tiene como un motor, es increíble», concluyó el técnico.
El guard promedia esta temporada 31,8 puntos, 10,6 rebotes y 10,3 asistencias en 34,9 minutos por partido. Números de profecía —aún por saber si cierta o no—, la carrera por el MVP vive sus últimos sprints.