Otro compromiso difícil, otra victoria.
Los Golden State Warriors vencieron en su visita a Toronto por 109–112 y su balance desde que arrancó la temporada es de 21–0, récord histórico en cuanto a comienzos de temporada en la historia del deporte profesional estadounidense.
Stephen Curry fue el amo y señor del partido y terminó con 44 puntos, incluyendo 12 puntos en los minutos finales y un 9 de 15 en triples. Curry es el primer jugador de la historia de la liga que anota 8 o más triples en dos partidos seguidos.
El MVP logró su séptimo partido de la temporada con 40 puntos o más y fue el segundo consecutivo tras lo 40 puntos que anotó en Charlotte el miércoles.
Klay Thompson aportó 26 puntos y Draymond Green 16 tantos, 9 rebotes y 6 asistencias.
Por los Raptors Kyle Lowry logró 41 puntos gracias a sus 6 triples, aunque esta vez su compañero de backcourt DeMar DeRozan falló en ataque y penalizó mucho a los canadienses. DeRozan se quedó en 16 puntos tras un 1 de 10 en tiros de campo.
Raptors: batalla sin premio
Con el de anoche los Raptors ya han disputado los dos encuentros de la temporada contra Golden State y no volverán a enfrentarse salvo que ambos equipos llegasen a las Finales.
Toronto ha plantado cara en ambos choques pero no ha conseguido ganar ninguno. En el Oracle Arena perdieron por 5 puntos y en casa por 3.
“Tenemos que entender que es el mejor equipo de la liga y los hemos tenido hasta la última posesión en ambos partidos”, dijo DeRozan. “Esto muestra lo buen equipo que podemos ser. Tenemos que aprender de ello”.
25 seguidas
El triunfo de anoche fue el 25º seguido en cuanto a partidos de temporada regular, solo por detrás de Los Angeles Lakers de la temporada 1971–72 con 33 victorias y Miami Heat de 2012–13 con 27.
Esta temporada los Warriors han ganado más partidos fuera de casa, 11, que como locales. Al equipo californiano aún le restan varios compromisos en el Este antes de volver a Oakland. Las visitas de los próximos días a Brooklyn, Indianapolis, Boston y Milwaukee complican soñar con alcanzar las 33 victorias seguidas, el récord de la NBA.