Testimonial se queda corto como apelativo para definir la temporada de Serge Ibaka con los Milwaukee Bucks. El pívot llegó a la franquicia de Wisconsin traspasado desde Los Angeles Clippers con la idea de reforzar el interior de los de Mike Budenholzer. Sin embargo, su bajo rendimiento provocó que el regreso de Brook Lopez le dejase fuera de la rotación de cara a playoffs. Lo cual no parece ser un impedimento para que los Bucks le firmen por un año más por el contrato mínimo de veterano, adelanta Shams Charania.
El pívot encadena un par de años muy irregulares en lo físico, pero lo cierto es que todavía está preparado para sumar algunos minutos decentes. En 19 partidos de liga regular con Milwaukee promedió 17 minutos sumando 7 puntos y 5,3 rebotes. Ibaka está lejos de ser la presencia defensiva y el ducho anotador que fue en su día, pero sí ayuda a la hora de dar descanso a Giannis en momentos poco trascendentes de los encuentros. A punto de cumplir 33 años, el hispano-congoleño buscará dejar sus problemas físicos atrás para aportar como veterano a un bloque creado con la idea de luchar cada año por el anillo.
(Fotografía de portada de Stacy Revere/Getty Images)