Shaquille O’Neal y Kobe Bryant llevaron a los Lakers a ganar tres anillos de la NBA —cuatro Finales— en los primeros años del siglo XXI. Una comunión deportiva idílica, intachable, pues contaba con una gran joven estrella exterior y el gran coco de la Liga por dentro. Perfecta a excepción de que la relación humana de ambos saltó por los aires.
Aquellos Lakers podían haber sometido la competición durante una década, pero el ego desmedido de sus dos estandartes aceleró el divorcio.
Shaq se pronunció de manera reciente sobre aquella separación de bienes, que dio con sí mismo en los Miami Heat, donde ganó otro anillo, y con Kobe, como único líder supremo —lo que él siempre anheló—, esperando su momento de gloria en Los Angeles.
O’Neal participó en una reunión virtual de Zoom con los jugadores de los New Orleans Saints, de la National Football League (NFL). Estuvo en la sesión porque ya había sido invitado y además le vino al pelo.
El jugador de los Sains, Drew Bress, había sido ampliamente criticado en los últimos días por airear su descontento con que los jugadores protesten por la situación en Estados Unidos arrodillándose cuando sonase el himno de los Estados Unidos. «Nunca estaré de acuerdo con quien falte el respeto a la bandera de los Estados Unidos de América», había dicho en una entrevista para Yahoo! Finance .
Ante el terremoto y críticas que generó su valoración, Bress tuvo que disculparse delante de la opinión pública y también ante sus dolidos compañeros de vestuario. «Me gustaría disculparme con mis amigos, compañeros de equipo, con la ciudad de New Orleans, con la comunidad negra, con la NFL y con cualquiera que se sintiera dolido con mis comentarios de ayer. Hablando con algunos de vosotros, me rompe el corazón saber el daño que he causado», podía colgar Bress en Instagram. Su disculpa se replicó después en vivo y en directo con sus compañeros de los Saints.
En tal ecosistema algo enrarecido, Shaq tendió un consejo a los participantes de la reunión de vídeo, instando a aceptar la disculpa de Bress y arreglar las cosas.
«Van a intentar dividiros, como hicieron con nosotros en los Lakers. Yo y Kobe (Bryant) teníamos algo grande, pero la prensa dividió nuestro equipo. Podríamos haber ganado cinco campeonatos más. Sed fuertes. No dejéis que la prensa os divida. No dejéis que os divida el mundo social media», pudo trasladar Shaq, según un testigo de los hechos consultado por el periodista Peter King, en su columna Football Morning in America.
Shaq da su visión de los hechos acerca de que los medios de comunicación fueron quienes desligaron aquel legendario conjunto púrpura y oro.
(Fotografía de portada: Getty Images/Getty Images for EIF & XQ)