En el seno de los Golden State Warriors no andan tranquilos. Ni pretenden estarlo.
Tras perder el sexto partido de las Finales de la NBA por 115 a 101 ante Cleveland Cavaliers, Steve Kerr estalló en rueda de prensa. El entrenador de los actuales campeones se quejó amargamente de la actuación arbitral que hizo que Stephen Curry terminase expulsado por primera vez en su carrera.
“Tenía todo el derecho para estar enfadado”, dijo Kerr sobre Curry y su reacción cuando le pitaron la sexta falta personal. “Es el MVP de la liga. Le han pitado seis faltas, tres de ellas absolutamente ridículas. Roba el balón a Kyrie una vez. LeBron finge en la última. Como MVP de la liga estamos hablando sobre faltas por solo tocar en las Finales de la NBA».
Respecto al hecho de que Curry lanzase su protector bucal contra el público, la acción concreta por la que el base fue expulsado de la pista, Kerr defendió el comportamiento de su jugador. “Estoy contento de que lanzase su protector. Tenía que estar enfadado a la fuerza”, dijo.
El técnico de los Warriors no se quedó ahí, pues denunció que los árbitros estaban haciendo su labor con distintas varas de medir. “Son las Finales y todo el mundo está luchando. Es un juego físico. Simplemente piensa en Steph Curry y Klay Thompson y como hacemos el ataque, como corremos, haciendo cortes, un ataque en movimiento. Si dejan a Cleveland agarrar y sujetar y luego pitan cualquier cosa al MVP de la liga para eliminarle, entonces no estoy de acuerdo”, sentenció.
«Merecido» triunfo
A pesar del tremendo enfado de Kerr y de cómo califico la labor del equipo arbitral, el entrenador reconoció que los Cavaliers superaron a Golden State y merecieron el triunfo.
“Quiero ser claro. No hemos perdido por el arbitraje”, explicó Kerr. “Nos han superado totalmente y Cleveland mereció ganar. Pero tres de esas seis faltas fueron totalmente inapropiadas para cualquiera, y menos para el MVP de la liga”.