Susto para los Warriors en Philadelphia

Tras una espectacular primera parte, Golden State Warriors se dejó llevar en los dos cuartos finales y estuvo a punto de pagarlo caro. Los actuales campeones se impusieron a Philadelphia 76ers por 105 a 108 gracias a un triple de Harrison Barnes a falta de 0,2 segundos.

Previamente, al poco de iniciarse el último cuarto, los 76ers, que habían llegado a estar 19 puntos abajo, se habían acercado en el marcador y Stephen Curry, Klay Thompson y el resto de titulares volvieron a pista para asegurar el triunfo. Steve Kerr, acostumbrado a dar descanso a sus principales jugadores en muchos últimos cuartos, esta vez echó mano de ellos, pero ni aún así consiguió evitar la debacle en ataque y los Warriors salvaron los muebles in extremis.

Thompson fue el máximo anotador del partido con 32 puntos, seguido de Curry con 23 puntos, 6 asistencias y 5 rebotes. Por los 76ers Isaiah Canaan logró 18 tantos, Ish Smith 16 y Jahlil Okafor 13 en su primer partido de la semana tras dos encuentros ausente.

Dos partes muy distintas

Golden State dio un recital en la primera parte del partido en el Wells Fargo Center, pero se vino abajo en la segunda. Los actuales campeones de la NBA se fueron al descanso con 73 puntos en su haber, una cifra ya de por sí llamativa, pero quizá aún lo fue más el número de pases de canastas que hicieron en ese periodo. Nada menos que 26 asistencias en los 32 tiros anotados durante los 24 minutos iniciales, un espectacular rendimiento del ataque de los Warriors.

Es decir, más del 80 por ciento de las canastas anotadas por el conjunto de Oakland vinieron precedidas de un pase de un miembro del equipo. En cuanto al acierto, resultó igualmente llamativo con un 65,3 por ciento de efectividad en los tiros de campo durante la primera parte.

De acuerdo a ESPN Stats, en la presente temporada ha habido 16 partes en las que se han llegado a los 70 puntos, siendo los Warriors responsables de 7 de esas 16 partes. Ningún otro equipo de la NBA ha hecho más de una parte de 70 puntos esta campaña.

Sin embargo, la segunda mitad fue otro cantar y los Warriors apenas pudieron anotar 35 puntos, su mínimo en una segunda parte en toda la temporada.

Los tiros libres

El partido en Philadelphia pasa a la historia de los Warriors por doble motivo. Es el primer encuentro en el que terminan con un solo tiro libre anotado —1 de 2 en los lanzamientos desde la línea— y además, se han convertido en el primer equipo de la NBA en los últimos 20 años en terminar una parte con al menos 70 puntos sin encestar un tiro libre.


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