Los Indiana Pacers lograron una ajustada victoria frente a los Washington Wizards por 105-107. El conjunto que dirige Nate McMillan salvó los muebles en los últimos segundos gracias a una canasta ganadora de Thaddeus Young (12 puntos y 11 rebotes).
El guión marcaba que la última bola se la iba a jugar Paul George; no obstante, la defensa capitalina marcó de cerca a la estrella de Indiana y tuvo que ser Young quien resolviera la papeleta.
«El plan era conseguir la última posesión para George, pero nos lo impidieron», señaló McMillan. «Le llegó el balón a Thad (Young) y queríamos que atacara la canasta. Hizo lo que se suponía que debía hacer. Bajó la cabeza y atacó el aro», añadió.
El conjunto de Indianapolis tuvo a tres jugadores con al menos veinte puntos: Paul George cosechó 27 y 9 rebotes; Jeff Teague 23 y 10 asistencias, y Miles Turner 20 y 8 rebotes.
En los capitalinos, que venían con la moral por la nubes tras imponerse a los Clippers, Bradley Beal aportó 22 puntos; Marcin Gortat destacó con 21 tantos y 13 rebotes, y el base John Wall amasó un nuevo doble-doble con 19 puntos y 10 asistencias.
«Esta derrota ha sido un poco frustrante», dijo Wall. «Les frenamos cuando tuvimos que hacerlo, ejecutamos bien nuestra ofensiva, y también mantuvimos el balón fuera de sus mejores jugadores», explicó.