La derrota de los Rockets ante los Warriors en el sexto partido fue un mazazo muy duro para la franquicia texana. Dada la lesión de Kevin Durant y la teórica falta de profundidad de Golden State, daba la sensación de que a Houston se le presentaba la oportunidad definitiva para coronarse en el Oeste, pero la realidad fue muy distinta. Y esto no ha sentado bien en la franquicia.
«Nos patearon el culo en nuestra propia casa» dijo Tilman Fertittta, propietario de los Rockets desde octubre de 2017, tras el encuentro. «Nos ganaron por 10 puntos en el último cuarto. Es inaceptable, ¿de acuerdo? Necesitamos ser mejores».
No obstante, la rabia solo duró un instante. El discurso del dueño del equipo a partir de ahí tomó un cariz más optimista y confiado en que las cosas irán por fin de cara: «Sé que vamos a estar a la altura de las circunstancias y que nuestro momento llegará. James Harden cumplirá 30 años en agosto, y Hakeem Olajuwon (jugador que lideró a los Rockets a sus dos únicos anillos en el 94 y 95) no ganó su primer campeonato hasta los 31. Puedo prometeros que ganaremos un anillo con Harden al frente porque no vamos a conformarnos con esto y vamos a hacer todo lo posible por construir un mejor equipo».
Pensando en el verano
Estas últimas declaraciones invitan a pensar que Houston será uno de los agentes más activos del mercado, algo que quedó reforzado por las siguientes palabras de Fertitta.
«Soy muy afortunado de contar con un quinteto como este, pero si podemos mejorar la plantilla no vamos a dudarlo. Es un hecho. Mi trabajo es asegurarme de que el equipo que esté en la pista el año que viene sea lo mejor posible» concluyó.
La gran cantidad de agentes libres de renombre que habrá este verano abre la puerta a muchos equipos para soñar, pues todos tienen a sus favoritos y ya han construido mentalmente su plantilla ideal para el curso 19/20. El caso de Fertitta parece no ser muy diferente, pero, a diferencia de otros equipos, los Rockets están bastante maniatados a nivel salarial. Contando solo los sueldos de los siete jugadores con contrato garantizado, el total asciende a más de 118 millones de dólares, lo que deja un margen de poco más de 13 millones antes de alcanzar el impuesto de lujo.
Superar este límite se antoja inevitable, pero hacerlo de forma que el equipo mejore sustancialmente resulta ya utópico. Veremos que pueden inventar Morey y Fertitta para que las declaraciones de este último no caigan en saco roto.
(Fotografía de portada: Tim Warner/Getty Images)