Lo que en el verano de 2022 se vio como una salvación, hoy se ve por el público general como una encrucijada. Dejounte Murray llegó a los Atlanta Hawsks para aliviar el peso creativo de Trae Young y, al mismo tiempo, ocultar sus carencias defensivas. Pero dos temporadas después de su aterrizaje, el equipo sigue maniatado por las dudas y el futuro en el puesto de base parece incierto. Con Young lesionado, se presentaba la oportunidad perfecta para demostrar si el problema era su estilo de juego. Pero, aunque Murray haya rendido bien en su ausencia, los resultados siguen sin llegar al nivel de las expectativas.
Por ello resulta extraño ver que ambos se sientan a charlar sobre el presente y el futuro de la franquicia en el podcast que dirige Young. «Creo que nuestra relación es buena», comienza Trae espantando cualquier rumor sobre fricciones personales. «Las charlas que tuvimos antes de que viniese. Las reuniones cuando al fin se dio el traspaso. Tenemos muy buenos recuerdos. Obviamente las cosas irían mejor ganando partidos, pero nuestra conexión es más profunda que eso».
«Somos dos bases y él está más establecido en la liga que yo. Pero cada uno tiene su situación. Después está la gente que habla de ello en internet, que saben que lo negativo es lo que vende. Así que, cuando veo todo eso sobre que nos tienen que traspasar a uno de los dos no significa nada para mí. Solo es alguien detrás de un ordenador», le siguió Murray.
Contexto de una pareja de versos sueltos
Lo cierto es que después de llegar a las finales del Este de 2021, los Hawks no han dejado de dar pasos atrás en su proyecto hagan lo que hagan. Ya sea traspasar por una estrella como Murray, airear el banquillo cambiando a Nate McMillan por Quin Snyder o sacando piezas importantes como John Collins o Kevin Huerter. Todos estos movimientos aparentemente en vano ponen sobre la mesa de cambiar de rumbo drásticamente. A ambos les restan este y tres años más de contrato, aunque Young se podría salir del suyo un año antes. Por si fuese poco, la química que se dibujaba entre ellos se ha quedado sobre el papel, lejos de la pista.
Nunca es el momento ideal para mover a una estrella de la liga, pero este verano podría ser el elegido.
(Fotografía de portada de Kevin C. Cox/Getty Images)