Los Wizards apenas fueron un pequeño obstáculo para los Nuggets en su duelo en el Ball Arena. El conjunto de Colorado aprovechó el mal momento y las ausencias de los capitalinos para imponerse por 141-128 en un duelo en el que nunca contaron con grandísimas ventajas pero que, al menos en la segunda mitad, siempre parecieron tener bajo control. Endosando a Washington su octava derrota consecutiva, los de Mike Malone se mantienen a un solo triunfo de la cabeza del Oeste, dando continuidad a su buen momento comandados por un estelar Nikola Jokic.
El serbio se encontró ante una defensa interior prácticamente inexistente, y no dudó en aprovecharlo para firmar su mejor actuación de lo que llevamos de curso. En ausencia de Kristaps Porzingis, Taj Gibson y Daniel Gafford fueron los encargados de intentar frenarle, un intento que resultó en vano en la inmensa mayoría de posesiones. El pívot terminó el choque con 43 puntos y un 85% de acierto en el tiro (17/20), un dato que resulta aún más impresionante teniendo en cuenta que uno de sus tres únicos fallos fue un triple desde su campo en la última posesión de la primera parte.
No obstante, Jokic no solo anotó, pues este fue también uno de sus mejores encuentros en otros apartados. Con 14 rebotes confirmó también en dicha materia su superioridad en el juego interior, con 8 asistencias brilló una vez más como generador para quedarse a las puertas del triple-doble; y con 5 robos logró ser también fundamental en defensa para evitar a los visitantes seguir el ritmo. Su dominio fue absolutamente bárbaro, y no dio a Washington ninguna opción de llegar con vida al final.
El serbio estuvo además bien secundado por varios de sus compañeros, especialmente por Bones Hyland y Aaron Gordon. El sophomore fue segundo en anotación con 23 tantos, mientras que el ex de los Magic le siguió con 22 aprovechando también la endeblez de la defensa interior de los Wizards. Este fue en general el aspecto más explotable para los locales, que sumaron la friolera de 98 puntos en la pintura visitante.
Sin Porzingis y sin Bradley Beal, los de Wes Unseld estuvieron comandados por Kyle Kuzma, que con 24 tantos trató sin éxito de mantener al equipo en el encuentro. El ala-pívot encontró el apoyo de Will Barton y Monte Morris, que en su primer partido en Denver tras salir traspasados lograron sumar 22 y 20 puntos respectivamente tras ser recibidos con una sonora ovación y con un vídeo que rendía tributo a su paso por el equipo.
«Para mí fue una bendición haber jugado en esta franquicia y hacerme un nombre y una carrera» comentó Barton, que pasó siete temporadas y media en los Nuggets. «Siempre valoraré haber podido mostrar de lo que soy capaz y ganarme el respeto de la liga. Celebro todos los grandes momentos que viví aquí».
(Fotografía de portada: Dustin Bradford/Getty Images)