¡Este muerto está muy vivo! Esa clásica nos sirve para definir lo que se vivió anoche en el Garden. Con 3-1 a favor, los aficionados de los Celtics se preparaban para vivir una fiesta. Ante sus ojos se planteaba un partido ‘sencillo’ ante unos Atlanta Hawks que llegaban además sin el sancionado Dejounte Murray. Todo estaba a favor, pero no contaban con que Trae Young tenía otros planes.
Si en otras ocasiones se ha criticado al base de los de Georgia, tras el Game 5 no se puede más que aplaudir. Con 38 puntos y 13 asistencias fue el líder absoluto de los suyos. Young guió a sus compañeros en una impresionante remontada al conseguir 14 puntos en los últimos tres minutos, los cuales culminó con un triple que dejó helado a su rival cuando el tiempo estaba a punto de extinguirse. Con él al mando los Hawks superaron una desventaja de 12 puntos cuando restaban poco más de cinco minutos. Sí, fue una auténtica exhibición para ganar 117-119 y devolver la serie a Atlanta cuando nadie confiaba en ello. Así cerró una noche para la historia.
Con la eliminatoria regresando ahora a casa de los Hawks, a nadie sorprendería que terminásemos viendo un séptimo partido en el Garden, y es que Young, quien llevaba mucho tiempo apagado, ha encontrado el camino para recuperar su clásico colmillo. «Tenía que confiar en lo que he hecho toda mi vida y lanzar con confianza», resume.
El point guard de los Hawks estuvo realmente bien, pero en ningún caso solo. John Collins aportó 22 puntos, Bgdan Bogdanovic (fue titular) alcanzó los 18 y De’Andre Hunter se fue hasta los 13.
Los errores de Boston
Los Celtics sienten que se les escapó un triunfo que tenían en su mano. Con ventajas superiores a los 10 puntos en el último cuarto, todo hacía presagiar que cerrarían la eliminatoria. No pudieron hacerlo. Jaylen Brown, autor de 35 puntos, lo achaca a una cadena de fallos que deberían haber evitado.
«Tuvimos algunas jugadas realmente estúpidas y también algunas faltas que no debieron suceder. Les dio la oportunidad de ponerse en marcha. Simplemente tenemos que se capaces de cerrar el partido», sentencia.
Si Jaylen cuajó un buen encuentro, no se puede decir lo mismo de Jayson Tatum. Pese a terminar con 19 puntos, ocho rebotes y ocho asistencias, su 1 de 10 en triples resultó doloroso.
(Fotografía de Maddie Meyer/Getty Images)