Tras un montón de lesiones, de desbarajustes en la configuración de los quintetos y de extraterrestres actuaciones por parte de James Harden para cubrir el vacío de algunos compañeros, los Rockets parecen haber encontrado el punto justo para ganar y ganar.
Nueva victoria, y van nueve seguidas, para el combinado de Mike D’Antoni, esta vez por 118-106 ante los Hornets. “Hoy ha sido un esfuerzo total por parte de todo el equipo”, apuntaba Harden, quien cada vez se ve más arropado en cancha por el resto del equipo.
El escolta acabó con 28 puntos, mientras que Eric Gordon se fue hasta los 22. “Ahora simplemente aprovecho lo que nuestra defensa me proporciona. Meter o fallar lanzamientos… Seguiré intentando los mismos, pero también puedo soltarla y ver cómo tenemos jugadores abiertos. Solo voy a aprovechar lo que puedan darme”, comentó el mismo Harden.
Al final del encuentro, D’Antoni también se mostró critico con sus jugadores al dejar que los Hornets se acercaran en el marcador tras haber construido una generosa diferencia. “Quizás sea ahora una nueva realidad o quizás algunos jugadores han de familiarizarse con ello, pero jamas se puede levantar el pie del acelerador”, remitió el técnico de Houston.
Los Rockets ganaron pese a la enorme actuación de Kemba Walker, autor de 40 puntos, 10 rebotes y 7 asistencias. Una barbaridad.
“No soy un gran aficionado a las victorias morales, pero ojalá lo de hoy nos sirva, especialmente para recargar nuestra energía y pasión”, dijo Walker, que trató por todos los medios de hacer que su equipo no se fuera del partido.
“Para Kemba, venir aquí y ser capaz de competir a pesar de las bajas dice mucho de su carácter y de su liderazgo”, señaló James Borrego, entrenador de Charlotte.
(Fotografía de portada de Streeter Lecka/Getty Images).