Unos Warriors en cuadro superaron un déficit de 17 puntos en el último periodo para cosechar su séptimo triunfo consecutivo. El conjunto dirigido por Steve Kerr se impuso en su visita a San Antonio por 124-120 mediante un último cuarto de auténtica locura.
Los de Oakland culminaron su remontada mediante un parcial favorable de 37-16 con un Jordan Poole que estuvo magnífico. El escolta destacó con 31 puntos, 6 rebotes y 5 asistencias, incluido un triple clave a falta de 19 segundos para el final.
«Nuestros veteranos que no pudieron jugar estuvieron muy emocionados. Ha sido una victoria fantástica», destacó Steve Kerr a ESPN.
Los de Golden State no pudieron contar con Stephen Curry, Klay Thompson, Draymond Green y Andre Wiggins en el back to back que disputaron. Pese a su delicada situación sacaron una victoria que fue oro puro.
Otros destacados de los visitantes fueron Damion Lee con 21 puntos, Moses Moody con 20 y el novato Jonathan Kuminga aportó 19 tantos desde la segunda unidad.
En los Spurs, Dejounte Murray guió su ofensiva con 27 puntos, 9 rebotes y 9 asistencia y Keldon Johnson aportó 21 tantos en su haber.
«El rebote ha sido el mayor de nuestros problemas durante todo el año. Y las pérdidas de balón. Probablemente empecé con dos en el último cuarto», admitió Murray.
Los Warriors cosecharon un 20 de 46 en triples; se impusieron en el rebote por un amplio 46-34 y aprovecharon las 14 pérdidas de balón que atesoraron los de Gregg Popovich.
(Fotografía de portada: David Berding/Getty Images)