Los Kings han logrado la segunda victoria de la era Doug Christie, victoria que, como la anterior, ha estado marcada por las bajas del rival. Los 76ers se presentaron en el Golden 1 Arena sin Joel Embiid, presumiblemente para que pueda jugar ante los Warriors en la segunda noche del back to back, y aunque los suyos sobrevivieron a su ausencia durante muchos minutos sí acabaron pagándola al final, pues un estrepitoso cierre les costó una nueva derrota por 113-107.
De la mano de Paul George y Tyrese Maxey, autores de 30 y 27 tantos respectivamente, los de Pensilvania tenían el duelo controlado con solvencia y parecían destinados a sumar su quinta victoria consecutiva. Pero en la NBA los partidos durante 48 minutos, una información que alguien se olvidó de pasar a unos 76ers que firmaron un cierre estrepitoso. Después de que Maxey convirtiera una bandeja y pusiera el 98-107 en el marcador a falta de más de tres minutos y medio para el final, los visitantes no volvieron no sumar un solo punto, allanando el camino a unos Kings que aprovecharon este desastre para dar la vuelta al encuentro.
Los californianos cerraron el choque con un parcial de 15-0 en el que destacó Malik Monk con 6 tantos pero en el que todos los hombres que estaban en pista aportaron. En cuanto olieron sangre, los Kings empezaron a abusar de unos 76ers que colapsaron en vivo y en directo, firmando tantas pérdidas como tiros intentados en dicho tramo (4), capturando un solo rebote y siendo en general arrasados en cada aspecto del juego. Y así, si la baja de Embiid no se había notado en 45 minutos, se notó más que nunca en los últimos tres.
Fox y Sabonis marcan el ritmo
Sacramento, por su parte, llegó con vida a esos compases finales gracias a la sensacional noche de De’Aaron Fox, que, gracias a su velocidad y capacidad para sumar en la pintura, se fue hasta los 35 puntos con un sensacional 13/16 en tiros de campo. Y mientras el base dominaba la anotación, Domantas Sabonis se imponía bajo los tableros, firmando un descomunal doble-doble de 17 tantos y 22 rebotes al que sumó 7 asistencias. Juntos, fueron tirando del carro de unos Kings que tardaron en despertar pero lo hicieron a tiempo, una frase que, con dos triunfos en sus tres primeros partidos con un nuevo entrenador, esperan que pueda aplicarse a su temporada.
No obstante, podría decirse que todavía están a la espera de un test real. Tras derrotar a los Mavericks sin Doncic e Irving y a los 76ers sin Embiid, se antoja difícil valorar el verdadero nivel de estos nuevos Kings, que pese a todo han logrado dos importantes triunfos y miran ya con algo menos de distancia hacia los puestos de play-in.
(Fotografía de portada: Sergio Estrada-Imagn Images)