Sea o no a propósito, Russell Westbrook sigue los pasos de Oscar Robertson en su camino de mantener a los Thunder en un equipo a tener en cuenta en el Oeste. El base firmó su 15º triple-doble de la presente temporada para liderar la cuarta victoria consecutiva de Oklahoma City, ahora en Miami por 94-106, y de paso conseguir otro hito estadístico hasta ahora solo reservado a «Big O».
Un año casi único
Desde el 1 de enero de 2016, Westbrook ha logrado sumar 30 triples-doble en temporada regular (31 contando Playoffs). En toda la historia, solo un jugador había alcanzado los 30 triples-dobles en un año natural y, por supuesto, fue Oscar Robertson. El entonces líder de los Cincinnati Royals consiguió acumular 34 triples-dobles en 1961.
Pero lo más importante para Russell Westbrook fue el triunfo. Sin la oposición en el lado rival de Goran Dragic, ausente por una contractura en la espalda, todo fue más fácil para uno de los favoritos al MVP. A mediados del segundo cuarto, Oklahoma City dominaba de 22 puntos, y a mediados del tercero ya acumulaba un triple-doble. Miami, con un flojo Hassan Whiteside (12 puntos, 8 rebotes y 4 pérdidas), nunca tuvo opción.
En mejor compañía
Al final, Westbrook terminó con 29 puntos, 17 rebotes y 11 asistencias. Números que el base está convirtiendo en rutinarios. A su lado, sus compañeros siguen creciendo. Enes Kanter aportó 19 puntos y 8 rebotes, Steven Adams 15 y 8, y Álex Abrines mantenía su trayectoria ascendente con 14 puntos y un 4/7 en triples desde el banquillo.
Oklahoma City ya es quinto del Oeste y amenazando con subir más posiciones en plena racha de cuatro victorias consecutivas. Westbrook, acercándonos a la mitad de la temporada, promedia 31,7 puntos, 10,9 asistencias y 10,6 rebotes. Por supuesto, la dependencia de su equipo en él tiene un lado tenebroso. Sus 5,5 pérdidas de promedio (7 en Miami) van a ritmo del peor promedio de la historia en una temporada. Pero, por supuesto, los Thunder pueden vivir con esa sombra.