Westbrook lidera una remontada épica en Dallas

A 3 minutos y medio del final, ante Oklahoma City, los Mavericks se permitían agarrarse a sus opciones de meterse en playoffs dejando casi sentenciado su partido. Un triple de Yogi Ferrell ponía 13 arriba a Dallas, lo que generalmente hubiera sido una ventaja decisiva. Pero Russell Westbrook se negó a rendirse ahí. Un espectacular final del base, aspirante con todo derecho al MVP, remontó el partido para el triunfo de sus Thunder por 91-92.

Más que un triple-doble


En el momento en el que Ferrell clavaba su triple casi definitivo, Westbrook ya había cumplido con su cita con el triple-doble (37º de la temporada). Pero, siempre dejando claro que su prioridad es ganar partidos, quedaba claro que no se conformaba. Los Mavericks se quedaron secos, siendo incapaces de anotar un solo punto más, mientras Oklahoma City se subia a la espalda de su estrella para enlazar un parcial de 14-0 que cambiaba la cara del partido.

De esos 14 puntos, 12 tuvieron la firma de Russell Westbrook (los otros 2 fueron de Steven Adams tras recuperar un fallo de Westbrook, precedido de unos posibles dobles). El base dejó casi culminada su obra maestra frustrando la penúltima posesión de los Mavericks, forzando una pérdida de J.J. Barea, y el remate llegó a 7 segundos del final. Westbrook subía el balón, clavaba los pies ante Wesley Matthews y soltaba un tiro desde media distancia que ponía finalmente a Oklahoma City por delante.

Derrota casi mortal


El lejanísimo triple final con el que Harrison Barnes quiso darle sin éxito la victoria a su equipo selló su destino. Era el último intento de recuperar las buenas sensaciones del resto del partido. Su buen baloncesto de equipo les permitió dominar durante tres cuartos, aprovechando especialmente un segundo cuarto para el olvido (10 puntos totales) de OKC. Russell Westbrook, pero, despertó a tiempo.

Los Mavericks pierden así una de sus últimas oportunidades de reducir la ventaja respecto a Portland y Denver, empatados por el octavo puesto del Oeste. Ya a cuatro victorias de ambos equipos, con solo nueve por jugarse, sus opciones son ya mínimas. Sin tanta urgencia, Oklahoma City se afianza en el más cómodo sexto puesto de la Conferencia. El hambre en cada partido de Russell Westbrook, pero, es algo demasiado especial.


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