El comienzo de Russell Westbrook como jugador de Los Angeles Clippers no está siendo nada sencillo. El base aterrizó en el conjunto californiano justo después de dejar a los vecinos Lakers y ser cortado por Utah. El plan era ser un importante refuerzo para un equipo cuya aspiración no es otra que conseguir el anillo. Obvio que no están descartados para nada, pero los primeros pasos con Russ como base titular no están dejando buenas sensaciones.
Anoche, visitando a los Warriors, los angelinos tuvieron una buena primera parte, pero fueron barridos en la segunda para acabar encajando un tremendo parcial de 70-35… El golpe fue enorme y para Westbrook supuso su cuarta derrota consecutiva en otros tantos encuentros jugando para los Clippers.
Con 28 minutos en pista, el jugador de 34 años firmó ocho puntos y seis asistencias. No tuvo su mejor noche de cara a canasta, ya que solo acertó tres de sus 12 lanzamientos, incluyendo un cero de cinco en triples. Fue su peor encuentros desde que llegó al equipo. Hasta la fecha promedia 14 puntos, 8,5 asistencias y 4,2 rebotes.
El principal problemas para los Clippers es que no tienen tiempo para ser pacientes. La derrota les ha hecho caer a puestos de play-in con un balance de 33-32. Necesitan sumar triunfos cuanto antes para mantenerse en la pelea y no verse abocados a un cara o cruz para estar finalmente presentes en la postemporada.
Le flotan sin miedo
Sin duda fue una de las imágenes del partido. Los Clippers atacaban y Draymond Green optó por dejar literalmente solo en la línea de tres puntos a Westbrook mientras botaba el balón. El jugador de los californianos no solo no sacó rédito de ello, sino que acabó hasta cierto punto desesperado al ver que no entraban sus lanzamientos.
Tras la finalización del partido, Draymond Green admitió que se trató de una táctica pensada para desestabilizar a Russ. «Cuando te enseñan a jugar al baloncesto te dicen que si estás abierto y con espacio deben lanzar. Sin embargo, si te encuentras en esa situación en todas las jugadas, empiezas a cuestionarte a ti mismo», sentencia.
(Fotografía de Ezra Shaw/Getty Images)