Hace semanas que era uno de los entrenadores con silla caliente en la liga y ya es oficial. Willie Green deja de ser el entrenador de los New Orleans Pelicans después de un nefasto inicio de temporada y varios cursos sin cumplir objetivos. La información, compartida en primera instancia por Chris Haynes, no detallaba quién sería su sustituto, pero después ha apuntado que será James Borrego, hasta ahora asistente.
Este es un claro caso de un entrenador cuya estancia en el banquillo no era el principal problema del equipo. Pero que también estaba lejos de ser una solución. Los Pelicans siguen vapuleados por las bajas en una espiral que comenzó hace demasiado tiempo como para localizar su raíz. Ahora bien, el equipo lleva meses sin rumbo alguno.
Joe Dumars toma su primera gran decisión como General Manager de los Pelicans tras sustituir a David Griffin. Bueno, la segunda después del aparentemente infame traspaso para elegir a Derick Queen en el pasado Draft.
Actualmente, los Pelicans cierran el Oeste con el cuarto peor récord de la liga (2-10) y se habla más de vender a medio equipo que de lo deportivo. La última piedra en el ataúd de Green fue la derrota de ayer ante Los Angeles lakers en la Copa NBA.
(Fotografía de portada de Stephen Lew-Imagn Images)
