La batalla de marcas deportivas en la NBA puede contar con un nuevo contendiente en breve. Según señala Nick DePaula de ESPN.com, New Balance tiene la intención de volver al mercado de zapatillas de baloncesto y para ello ya habrían elegido jugador para el relanzamiento: Gordon Hayward.
El plan de la marca estadounidense pasaría por hacerse con el alero All-Star de Boston Celtics, algo que no es casualidad, ya que este juega en la franquicia de Massachusetts, justo el lugar de fundación de la empresa y donde tienen su sede central. Además, hace poco han cerrado un acuerdo de colaboración con los Celtics con la idea de ir echando raíces en la parcela de baloncesto, la cual no tiene actualmente una sección en su página web.
Para saber si podrán conseguir su objetivo deberán esperar hasta el mes de agosto, ya que ese será el momento en el que Hayward concluya su vinculación con Nike, marca con la que ha pasado la mayor parte de su carrera. La cuestión es que no serán los únicos que pujen por Hayward. Se espera que la marca china Anta, la cual cuenta ya con Klay Thompson, puje para hacerse con el small-forward.
En cierto modo puede ser entendida como una apuesta arriesgada. Hayward lleva toda una temporada sin jugar tras la devastadora lesión que sufrió en el primer curso de la campaña 2017-18. En el curso anterior la ex estrella de Butler se marchó hasta los 21,9 puntos, 5,4 rebotes y 3,5 asistencias de promedio, números que lo encumbraron como All-Star.
Recordando a Worthy
La historia de New Balance en la NBA es breve pero exitosa. Corrían los 80, esa década en la que para muchos lo mejor fue el básket –escuchen Tote King–, cuando esta marca estadounidense brillaba en las pistas haciéndose con el legendario James Worthy. Elegido número 1 del Draft de 1982, este jugador de Los Angeles Lakers calzaría New Balance hasta 1990. Con él como imagen NB lanzó su primera zapatilla con nombre de jugador: la New Balance Worthy 740. El modelo incluía los colores de los Lakers y llevaban el nombre del ala-pívot en la lengüeta. Tras la marcha de su estrella a Adidas, New Balance se fue alejando poco a poco del baloncesto. Ahora quiere recuperar el terreno perdido.